Pese a contar con un presupuesto anual de S/ 727,346, el Sistema de Atención Médica de Urgencia (SAMU) de Junín atraviesa una de las peores crisis operativas de los últimos años. La Contraloría General de la República, a través del informe de control N° 024-2025-OCI/2814-SVC, reveló que las tres ambulancias asignadas al servicio están completamente inoperativas, dejando sin atención a más de 230 emergencias médicas en menos de un mes.
Lo que halló la Contraloría
Según la plataforma del Ministerio de Economía y Finanzas, al 30 de mayo el SAMU Junín solo había ejecutado el 33.1% de su presupuesto asignado, en pleno contexto de emergencia sanitaria por las bajas temperaturas en la región.
Mientras pacientes en estado crítico deben ser trasladados por bomberos, policías o personal de serenazgo, sin protocolos, convenios ni garantías mínimas de atención.
La ambulancia EUD-176, por ejemplo, fue devuelta al taller días después de un mantenimiento, mientras que la QO-2385 se encuentra inoperativa por trámites documentarios no resueltos, y la EUD-187 lleva más de dos años fuera de servicio tras un accidente, sin presupuesto asignado para su reparación. Pese a este escenario, nueve conductores del SAMU permanecen en planilla, sin unidades operativas para cumplir su labor.