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Los deudos de Luis Alberto Napa Díaz exigieron a las autoridades que se ubique al conductor del vehículo que el pasado 6 de agosto atropello a este hombre en circunstancias que cruzaba la carretera Panamericana Sur, en el sector conocido como antigua balanza. El accidentado fue referido a un nosocomio de la capital y permaneció hospitalizado debido a su critico estado de salud hasta que se agotaron sus fuerzas.
Como se recuerda, Napa Díaz la tarde de aquel día salió de su vivienda, ubicada en el distrito de Sunampe, hacia Chincha. En horas de la noche cuando estaba de retorno a su casa fue embestido por un vehículo que por las características captadas por las cámaras de seguridad se trataría de una moderna camioneta. El peatón quedó inconsciente y fue evacuado al hospital San José, para ese entonces como NN.
Al día siguiente su familia que había emprendido su búsqueda acude al nosocomio y lo identifica. Luis Alberto estaba en el área de trauma shock, con pronostico reservado. La opción que le daban a su hermana Rosario Napa era referirlo a un nosocomio de mayor complejidad para ser atendido por un neurocirujano. Ella envió solicitud a muchas instituciones esperando que alguien pueda acoger al paciente.
Los días pasaban y la salud de este hombre se deterioraba. Finalmente se realiza la referencia, pero ya había transcurrido una semana. Luis Alberto murió la tarde del lunes en un nosocomio de la capital. Ayer sus compañeros se sumaron a sus familiares en el cortejo fúnebre. Y también al pedido de justicia y se encuentre al chófer del vehículo que escapó de la escena del accidente y permanece sin ser identificado.
Su hermana, Rosario Napa, solicitó a los vecinos de la zona donde ocurrió el atropello que cooperen con la investigación que está a cargo de la policía y que también se entreguen todos los videos de las cámaras de seguridad para encontrar al responsable de este accidente que termino en fatalidad. Luis Alberto era el soporte de su familia, deja en la orfandad a siete hijos, la última de tres meses de nacida.
