Las instituciones educativas se están convirtiendo en el blanco de la delincuencia. Sujetos de mal vivir en menos de 24 horas atacaron el colegio 22255 Rolando Alzamora Paredes y también la I. E. N° 22678 del asentamiento humano Micaela Bastidas, ambos ubicados en el distrito de Pueblo Nuevo. Los ladrones se llevaron equipos de cómputo, sonido, kits de aseo, entre otros y además de generar daños materiales.
Robos
Genaro López, director del Rolando Alzamora, indica que los ladrones ingresaron por la calle Lima, al burlar el cerco perimétrico. Por las huellas encontradas en el interior se presume que al menos dos sujetos de madrugada avanzaron hasta los servicios higiénicos en donde se había guardado los bienes de valor. Los pillos forzaron la puerta, al parecer, con una herramienta agrícola y sacaron las mochilas de emergencia, bomba de agua, kits de aseo y más.
Este es el segundo ataque del hampa que sufre el colegio en poco tiempo. La primera vez se robaron equipos más costosos que no han sido recuperados. Se presume que se trata de la misma banda, que conoce hasta la ubicación de las cámaras de seguridad. López solicitó mayor presencia policial por el cuadrante y exhortó a las autoridades locales que puedan destinar presupuesto para colocar protectores metálicos en cada puerta.
La otra escuela víctima de la delincuencia queda en el A. H. Micaela Bastidas. Los forajidos también treparon por el cerco perimétrico, bajaron por una escalera y fueron en búsqueda de los bienes educativos. Para ingresar a las aulas y a la dirección forzaron las chapas de la puerta. Según la información preliminar, faltan equipos de cómputo, reflectores, equipo de sonido, estabilizadores, entre otras especies.
Los malandros luego de acopiar las pertenencias de la escuela 22678 vandalizaron el candado que protegía la puerta principal. Por ese ingreso fue que cargaron con todas las cosas a un vehículo que esperaba en el exterior con los demás integrantes de la banda que tienen en la mira a las instituciones educativas. Al parecer, la presencia de un peatón motivó que estos huyeran abandonando una mochila de desinfección y una bolsa con objetos diversos.