Es la primera en llegar y última en irse. Esa es la rutina de lunes a viernes de María Margarita Ormeño Luján de 74 años, quien desde tiempo atrás se coloca en la puerta de ingreso del colegio San Agustín, que se ubica en el poblado chinchano del mismo nombre, para proteger a los niños y niñas del nivel primaria. La septuagenaria no descansa ningún día y tiene por misión propia entregar sanos y salvos a los alumnos.
Margarita, como la llaman los vecinos de la zona, a pesar de su avanzada edad no se amilana ante nada. Camina por las calles sin ningún temor para instalarse en el frontis de la institución educativa. Ella, espera que todos los menores ingresen al local escolar y cuando su tarea esta cumplida se retira momentáneamente pues luego retorna para el horario de salida y hace lo mismo para el turno de la tarde.
La mujer avanza a paso firme, direcciona con voz de mando para cuidar que los menores se eduquen y regresen a sus casas sin tener ninguna complicación. Margarita realiza su labor sin recibir ninguna recompensa y con la única satisfacción de hacer algo por la protección de los más indefensos. “Hay tantas cosas que pueden pasar y yo tengo que estar al cuidado de los alumnos”, precisa Ormeño Luján.
Seguridad ciudadana
Y no solo destina su tiempo para la seguridad escolar, sino también para la vigilancia de su cuadrante. Margarita es integrante de la Junta Vecinal de San Agustín y ante la ocurrencia de algún hecho al margen de la ley se comunica con la directiva del poblado y con la policía. En la víspera el comandante Adrián Trillo comisario de Chincha Alta y persona de la Sección Policía Comunitaria visitó su hogar y entregó productos para que ella emprenda un pequeño negocio.
La septuagenaria con sus manzanas acarameladas y su canchita a precio popular consigue reunir dinero para su alimentación mientras espera ser considerada como beneficiaria por el Programa Nacional de Asistencia Solidaria Pensión 65. “Lo único que pido es mi Pensión 65, para ayudarme. Por favor ayúdenme”, solicita esta mujer que expone su salud e integridad para cuidar de otros.