Las intensas lluvias en la región Ica, afectaron no solo a miles de familias, sino también a uno de los patrimonios arqueológicos más importantes del país: las Líneas de Nasca. Según informes preliminares, los huaicos y la acumulación de agua han alterado partes del terreno donde se encuentran los geoglifos.
Daños en la zona arqueológica
Las intensas precipitaciones han generado deslizamientos de lodo y sedimentos que han impactado áreas donde se ubican algunas de las enigmáticas figuras trazadas en el desierto. Especialistas del Ministerio de Cultura han iniciado una evaluación para determinar el alcance del daño, pero ya se advierte que algunas líneas podrían haberse visto parcialmente afectadas.
La activación de la quebrada San Martín arrastró lodo y piedras hasta la Torre Mirador, dañando las figuras del árbol, la mano y el lagarto, ubicadas en el kilómetro 422 de la Panamericana Sur. Cabe señalar que en el año 2009 ya se restauraron cinco geoglifos por un evento similar.
La emergencia climática en Ica continúa con lluvias intensas y desbordes, dejando a cientos de familias damnificadas y provocando la interrupción de rutas turísticas y comerciales en la región.
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