La Libertad suma ya 191 homicidios en lo que va del año. La cifra es más alta a la del año anterior: 119. Frente a este escenario, el gobernador regional, Manuel Llempén, le solicitó al presidente Pedro Castillo en la visita de este último a Trujillo, el pasado viernes, la presencia del Ejército Peruano en las calles más convulsas de la región para apoyar la labor de la Policía y reducir los índices de criminalidad, tal como ocurre en las regiones de Lima y el Callao.
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Posiciones
La solicitud de la autoridad regional ha tenido eco en los alcaldes de Florencia de Mora (Trujillo) y Ascope, dos de los municipios donde el crimen organizado azota con más fuerza desde hace casi dos décadas.
“Apoyo el pedido hecho por el gobernador. La presencia del Ejército en las calles es necesaria”, dijo a este Diario el burgomaestre florenciano, Hermes Cabeza Cortez.
La autoridad edil argumentó por qué los soldados deben patrullar su distrito: “La Policía no se da abasto, pues no tenemos muchos agentes y tampoco contamos con una importante cantidad de patrulleros”.
Florencia de Mora tiene una población de unos 75 mil habitantes, pero no más de 80 policías prestan servicio en esta jurisdicción; es decir, hay un agente por cada 937 personas, cuando el estándar internacional indica que el promedio es de un guardia por cada 240 pobladores.
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La situación se agudiza, añadió Hermes Cabeza, debido a que solo un 5% de los ciudadanos paga sus tributos. “Entonces, no hay más presupuesto para contratar más serenos y vehículos para hacerle frente a la delincuencia”, enfatizó el alcalde.
En Ascope, donde también operan organizaciones criminales dedicadas al sicariato, la extorsión y el tráfico ilícito de terrenos, la situación es similar, aseguró el alcalde provincial, John Vargas Campos.
Hay municipios como Magdalena de Cao que no tienen más de diez policías y que no cuentan con un cuerpo de serenazgo por falta de presupuesto.
“Tenemos un déficit de agentes policiales. Aquí no estamos en Trujillo, donde poseen una gran cantidad de carros, policías y serenos”, lamentó el alcalde.
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John Vargas respalda el pedido planteado por el gobernador regional, pero también le pide que escuche primero a las autoridades locales. “Apoyo lo hecho por el gobernador, pero debe crear también las condiciones para que los soldados salgan a las calles”, enfatizó.
Vargas aseguró que el Ministerio de Defensa ha ofrecido, a través de subprefectos de la zona, enviar 75 soldados a Ascope para que apoyen la labor policial, pero el cuartel de Chocope no está en buenas condiciones.
“El cuartel solo tiene un punto de agua y se necesita construir un pozo. De qué vale que [Llempén] pida que nos envíen soldados, si somos los alcaldes los que asumimos la responsabilidad de todo lo que esto trae”, manifestó.
El alcalde distrital de Moche, Arturo Fernández Bazán, afirmó que no apoya el pedido de Manuel Llempén, pues sería un “premio” para la Policía, a la que calificó de “corrupta” e “incapaz”. Sin embargo, sostuvo que de aprobarse la solicitud del gobernador, que solo sea el Ejército el que vele por la seguridad de la población. “Para qué hacer doble gasto. La Policía solo sale a coimear y no cuida al ciudadano El Ejército está más adoctrinado para defender a la patria”, señaló.