Maleantes desatan el terror en centro educativo del caserío El Huayo, en Gran Chimú. Les dejaron una carta y una mecha de dinamita y les dicen: “Plata o plomo”.
Maleantes desatan el terror en centro educativo del caserío El Huayo, en Gran Chimú. Les dejaron una carta y una mecha de dinamita y les dicen: “Plata o plomo”.

La ola criminal que golpea a la región ha desbordado todo límite. Ayer el gerente regional de Educación de La Libertad, Martín Camacho, reveló que una supuesta banda de extorsionadores ha sembrado el terror en los profesores y padres de familia de la institución educativa N°80656 Santiago Martín Ayllón, del centro poblado El Huayo, en el distrito de Lucma, provincia de Gran Chimú.

VER MÁS: Trujillo: Pobladores marchan y protestan contra gestión del alcalde Arturo Fernández

Ocurre que los maleantes han empezado a extorsionar a los maestros y a los progenitores de los alumnos, pues les exigen el pago de un “cupo” de S/ 5.00 por persona (docente y padre de familia) para dejarlos trabajar tranquilos. Como evidencia de que no se trata de una broma, los facinerosos dejaron una carta con contenido extorsivo y una mecha de dinamita en el portón del centro educativo. “Es plata o plomo”, advierten los hampones.


MIEDO

Por temor a las amenazas de los extorsionadores, la plana directiva del colegio decidió que los profesores y alumnos ya no asistan al centro educativo y terminen el año escolar con clases virtuales.

Los maleantes dejaron un número telefónico para que el director del colegio se comunique y lleguen a un acuerdo, pero esa comunicación nunca se dio y ya esos datos serán entregados a la Policía.

Martín Camacho comentó que ya se ha informado a la prefecta regional de La Libertad, Carolina Velasco, para que coordine la presencia y resguardo policial en esa comunidad alejada del ande liberteño.


PESQUISAS

Del mismo modo, Martín Camacho comentó que continúan las investigaciones para identificar a los que están detrás de las amenazas a un profesor de la institución educativa Cristo Rey de Pacanguilla, ubicada en la provincia de Chepén. Desconocidos le enviaron mensajes y fotos de un revólver y balas para exigir que apruebe a todo el aula.

TE PUEDE INTERESAR: