Una fiesta Covid-19 terminó en tragedia luego de que un joven de 22 años fuera asesinado a balazos presuntamente por uno de sus familiares. Este nuevo hecho de sangre se registró la noche del domingo, en el distrito de Huaranchal, en la provincia de Otuzco.
Hechos
Según testigos del caserío La Manzana, la víctima, identificada como José Giancarlo Bello Valdez, se encontraba reunido con un grupo de personas con las que bailó y tomó abundante cerveza, sin imaginar que sería su última celebración.
Pasada las 7:00 de la noche, Bello Valdez se enfrascó en una pelea con su primo hermano conocido como “El Gringo”, quien tras golpearse con puñetes y patadas y, al ver que había perdido, sacó un arma de fuego y le disparó a quemarropa.
Pobladores manifestaron que habría disparado hasta en tres oportunidades.
“Gringo”, tras perpetrar el crimen, escapó corriendo, y al ver la desesperación de la gente aprovechó para escapar con rumbo desconocido, mientras que el infortunado quedó tendido en el piso y murió desangrado.
Hasta el lugar llegaron los efectivos policiales para realizar las diligencias correspondientes, pero los familiares del fallecido y los moradores de la zona obstaculizaron las investigaciones e incluso se opusieron a que el cadáver sea trasladado a la morgue de Trujillo.
Las rondas campesinas ya estarían tras los pasos del asesino.