Laquipampa comprende 8 mil hectáreas, siendo sus elementos de conservación: Bosque Montano Bajo, Bosque Seco de Colina y Bosque de Matorral Montano Espinozo.
Laquipampa comprende 8 mil hectáreas, siendo sus elementos de conservación: Bosque Montano Bajo, Bosque Seco de Colina y Bosque de Matorral Montano Espinozo.

La región Lambayeque cuenta con un destino turístico ideal para el avistamiento de flora y fauna silvestre, e incluso donde disfrutar de magníficas caídas de agua.

Se trata del Refugio de Vida Silvestre Laquipampa, ubicado en el distrito de Incahuasi, provincia de Ferreñafe.

Esta Área Natural Protegida se creó con el objetivo de preservar especies en peligro de extinción, las cuales ahora son conocidas como animales emblemas de Lambayeque.

“Tenemos 22 especies de pava aliblanca y 17 osos de anteojos que estamos preservando con diversas estrategias, como por ejemplo, el monitoreo con cámaras trampa”, señaló la jefa del Refugio de Vida Silvestre Laquipampa del Sernanp - Lambayeque, Leticia Vásquez Mejía.

Contando con este gran potencial, desde hace unos años, el Sernanp (Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas) promueve diferentes rutas de caminatas en Laquipampa (Shambo, Lajas, del Reloj), con el fin de atraer turistas que deseen disfrutar de hermosos paisajes y cataratas.


“En promedio son 2 mil turistas que nos visitan al año y esperamos que se conozca no solo a nivel local y nacional, sino internacional. Este refugio de vida silvestre tiene 8,328.64 hectáreas y, con el apoyo de la comunidad y todos los actores que están en la zona de amortiguamiento, hemos logrado más del 80% de conservación”, señaló.

En dialogo con Correo, la especialista indicó que Laquipampa es el hábitat ideal para la pava aliblanca y el oso de anteojos, pues allí crece una diversidad de plantas que son parte de su dieta alimenticia.

“La pava aliblanca generalmente se encuentra donde hay ojos de agua o jagüey, y sus alimentos como el overo, los cerezos y el huayrul. Asimismo, el oso de anteojos, aprovecha o gusta de la achupalla y también de zapote en la parte baja. Nosotros hemos reforestado 5 hectáreas con cerezo y otras especies”, indicó.

Finalmente, precisó que aunque solo cuentan con 4 guarda parques oficiales, un especialista y la jefatura, reciben el apoyo de la comunidad y vigilantes comunales. “Sin ellos tal vez la conservación no tendría un resultado positivo que ahora estamos teniendo”, dijo.


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