Uno de los sicarios que participó en algunos crímenes alias “Calandraca”, “Flaco” “Peluche” está no habido.
Uno de los sicarios que participó en algunos crímenes alias “Calandraca”, “Flaco” “Peluche” está no habido.

Son cinco los miembros de la red criminal “” los que tienen orden de captura y aún se encuentran escondidos para evitar ser arrestados, en la región Lambayeque.

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Correo tuvo acceso a la resolución de detención preliminar emitida por el Cuarto Juzgado de Investigación Preparatoria de Chiclayo, donde se detalla los nombres de cada uno de los integrantes que aún faltan detener y los roles que cumplían dentro de la red criminal que operaba en la región.

Prófugos

Una de ellos es Brenda Yessenia Bautista Erazo, conocida en el mundo del hampa con el alias de “Brenda”.

A ella se le acusa de ser la “visionera” y recaudadora de dinero, es decir se encarga de brindar información al cabecilla de “La Nueva Generación del Crimen”, Jesús Antonio Códova Castillo (a) “Toño”, “Toñito” o “Tunky”.

Les brindaba la ubicación de las personas que iban a ser asesinadas por los sicarios de la mafia. También recibía el dinero de todos los que los contrataban, el cual luego le hacía entrega al financista de la organización, Juan Francisco Martínez Irureta (a) “Gordo Pancho” o “Pancho Pistolas”, para pagar a los ejecutores de los homicidios.

José Ronald Tingal Coronel (a) “Loco Julio”, la función que desempeñaba era ser “ajustador”, esto significa que con un revólver amenazaba y reducía a los agraviados durante los asaltos y así poder despojarlos de su dinero y objetos de valor.

Asimismo, durante las investigaciones se determinó que era el conductor de una motocicleta sin placa de rodaje, donde trasladaba a los sicarios de la red delictiva hasta el lugar donde matarían a las víctimas por encargo.

De igual forma era quien designaba qué sicario participaría de las muertes y coordinaba el apoyo de otros choferes para movilizarlos, así como de las municiones y armas de fuego que serían utilizadas.

Marlon Yamunaqué Miranda (a) “Coscu”, era también conductor y transportador de armamento para los criminales a sueldo.

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Sicario suelto

José Manuel Díaz Mejía, alias “Calandraca” “Serrano”, “Flaco” o “Peluche”, sería uno de los siacarios que previo pago acabó con la vida de algunas de las personas. Aveces también era el que manejaba las motos llevando a sus compinches.

Se le atribuye haber participado en el homicidio de Gianfranco Guevara Castro (a) “Chuck Norris”.

En algunas escuchas legales se determinó el momento que le informaban el crimen.

NN: Dónde andas, ya lo hicimos ya.

FLACO: No, por acá no hables nada.

NN: A ya, para mandarte a recoger un perro.

FLACO: Confirmado, confirmado.

NN: Ahorita pego para el cuarto para hablar.

FLACO: Mira, tómate una foto por acá on para que no se la agarren contigo, no falta por ahí los rayas.

NN: No pe h... si acá hay cámaras, mi hermana conoce este telo.

FLACO: Le han bajado toda una cacerina on en la cabeza en la espalda, ha sido por donde lo han comido al enano, al Magallo.

NN: Por ahí ha sido.

FLACO: Si.

También figura como no habida, Marianella del Carmen Salazar Vélez (a) “Nela”. A ella se le imputa haber participado en asaltos, uno de ellos en el distrito de Pacora.

Junto a Manuel Antonio Alarcón Vélez (a) “Mangas”, el 11 de mayo del 2021 llegó hasta la vivienda ubicada en calle Leoncio Prado y utilizaron como pretexto la compra de una caja de cervezas para que la agraviada, Amelia Alcira Saca Puicón abriera la puerta de su domicilio.

“Empezaron a empujarla hacía el interior de su domicilio, donde luego de taparle la boca le quitaron su pijama que tenía puesta y la colocaron boca abajo con las manos hacía atrás sobre un sofá y “Mangas” procedió a atarla con dicha pijama. Enseguida “Nela”, se dirigió a la puerta de ingreso para cumplir la función de “Campana”, siendo “Mangas” y el “NN” los que se dirigieron a la habitación para apoderarse de S/30,000 de la venta de cerveza. También dinero de sus ahorros de jubilada, joyas de oro, euros y dólares que le enviaba su hijo, entre otros objetos de valor”, se lee en el documento.