Detectives de Homicidios de la División de Investigación Criminal manejan como móvil de estos asesinatos el ajuste de cuenta o venganza por la violencia con la que los mataron.
Detectives de Homicidios de la División de Investigación Criminal manejan como móvil de estos asesinatos el ajuste de cuenta o venganza por la violencia con la que los mataron.

En menos de un día, dos crímenes a balazos han movilizado a los agentes de la División de Investigación Criminal de Chiclayo, tras la violenta muerte de un colombiano y un obrero en el distrito más popular de la región

VER MÁS: Asesinan a trabajador de grifo en Olmos, Lambayeque

Obrero

Uno de los asesinatos más crueles fue el que se registró al borde las 10 de la noche en la cuadra 5 de la calle San Pedro, en el distrito de José Leonardo Ortiz, donde fue asesinado el obrero Erick Ángel Tapia Velásquez (36), atacado a balazos en la cabeza por desconocidos.

Los vecinos del lugar alertaron a la Policía de lo sucedido y cuando las autoridades acudieron a la zona, la víctima había sido evacuada al Hospital Las Mercedes de Chiclayo, donde falleció horas después.

Personal de Homicidios y del Ministerio Público desarrollaron las diligencias de levantamiento del cadáver para el trasladado a la Morgue del cuerpo, a la espera de sus familiares.

Fueron cuatro los impactos de bala en la cabeza que acabaron con su vida y, por la crueldad de los hechos, los agentes de Homicidios sospechan que el crimen tuvo como móvil “un ajuste de cuenta o venganza”.

“En este caso, sus verdugos llegaron con una consigna de acabar con su vida, aquí creemos que no hubo duda, lo buscaban para matarlo y cumplieron con su objetivo. Ahora las razones son materia de investigación”, indicaron los detectives.

La Policía informó que la pareja de la víctima, Yenifer Medina Avellaneda (35), acompañado de Wilder Orlando Tapia Velásquez (38), auxiliaron y trasladaron al obrero al hospital Las Mercedes, donde horas después falleció.

PUEDE LEER: Lambayeque: Dos muertos deja fatal despiste

Colombiano

En tanto, horas antes, en el mismo distrito, en el frontis del inmueble ubicado en la calle San Antonio N° 812 fue asesinado el ciudadano colombiano Mel Gilbssom Romero Cruz (23). Él fue encontrado a pocos metros del inmueble, sin vida y presentaba un impacto de bala en la cabeza. Las autoridades dispusieron el levantamiento del cuerpo y el traslado del mismo a la morgue de Chiclayo para las diligencias de necropsia de ley.

Se conoció que la víctima alquilaba una habitación en el segundo nivel del inmueble citado, desde hace tres meses y se dedicaba a trabajos eventuales de pintor, electricista y vendedor ambulante de golosinas.

Testigos, aseguran que minutos antes de ser victimado se encontraba en el frontis de la casa, discutiendo con dos hombres de nacionalidad venezolana y fue uno de éstos quien le disparó, para luego darse a la fuga caminando por la calle España.

Detectives de Homicidios también creen que el móvil fue un “ajuste de cuentas”. Los agentes investigan si algunas cámaras de seguridad de la zona grabaron el momento del crimen y la fuga de los asesinos.