La Fiscalía Anticorrupción solicitó prisión preventiva para cinco policías del Escuadrón Verde de Chiclayo por exigir dinero a un comerciante, a cambio de no decomisarle su mercadería.
Se trata de los suboficiales Marino Flores Gaona (51), César Enrique Chumpén Baigorria (45), Richard Huaripata Ramírez (31), William Franklin Guevara Montalvo (29) y Junior Miliciades Mego Saavedra (30).
Los cinco agentes se encuentran no habidos desde el 09 de octubre, cuando el Poder Judicial ordenó la detención preliminar y el allanamiento de sus viviendas, por lo que se presume fueron alertados, logrando darse a la fuga.
Los hechos ocurrieron el 04 de abril de 2024, cuando el agraviado Jorge Luis Cadenillas Acostupa conducía su minivan, acompañado de su madre, Yony Acostupa Calderón, a fin de repartir su mercadería (suplementos deportivos).
En ese momento, se percató que dos sujetos a bordo de motocicletas y un vehículo marca Suzuki los seguían, por lo que aceleró creyendo que eran asaltantes.
Toda la persecución alrededor de 9 calles de Chiclayo quedó registrada en cámaras de seguridad de locales comerciales (restaurante Mi Rico Perú, supermercado Metro, bazar Las Américas, multiservicio W&J, etc).
Al quedar cercado, recién el agraviado logró reconocer a los policías, pues coincidentemente eran los mismos que lo intervinieron en mayo de 2023. “¿Por qué me estaban siguiendo, como si fuesen asaltantes?”, les increpó.
Según la declaración del denunciante, en ese momento, el suboficial César Chumpén le respondió “te has dado a la fuga, te vamos a llevar a la comisaría”. “No fue así, Ustedes no llevan ropa de policía, ni sirena, encima están con mascarillas y ropa oscura, como asaltantes”, replicó.
Al ver que su madre tuvo síntomas de hipertensión, dificultad para respirar y expresión de náuseas, Cadenillas Acostupa atinó a decir: “por favor jefe no me haga daño, no llevo nada indebido, solo tengo 200 soles”.
Ante el ofrecimiento, Chumpén Baigorria habría respondido: “Aquí somos varios y tengo que llevarle su parte al jefe”. “No pasa nada, vamos que te llevo a la comisaría con todo”. “Solo con 6 mil soles te vas”.
“Es mucho, no tengo esa cantidad”, respondió el agraviado, mientras los demás agentes solo miraban atentos, sin decir nada.
Luego le planteó pagar S/ 4,000 para ser liberado, monto que aceptó entregar el denunciante, pero para ello, debía ir a su vivienda. Entonces, se ofrecieron a llevarlo, no sin antes dejar su celular y permitir que su madre quede retenida dentro del vehículo, en el mismo lugar donde fueron intervenidos, en la prolongación Chinchaysuyo, cerca a una acequia.
Al llegar a su domicilio ubicado en el pueblo joven Diego Ferré, encontró a su hermano Edward Cadenillas Acostupa y a su cuñado Kevin Torres Quesquén. Les contó lo sucedido y ellos le entregaron sus tarjetas bancarias para que retire el dinero.
Del mismo modo, los agentes se ofrecieron a llevarlo hasta el centro comercial Real Plaza. Junior Mego conducía el vehículo y Cesar Chumpén iba en el asiento posterior; mientras eran seguidos por Richard Huaripata y Willian Guevara en motocicleta. Según la Fiscalía, esto quedó corroborado en cámara de video donde se aprecia la placa del automóvil M3M-299.
El denunciante afirmó que le entregó los S/ 4 mil a César Chumpén y luego lo llevaron hasta donde se encontraba su madre, quien estaba acompañada de Marino Flores. A ella la encontró descompensada, por lo que la llevó hasta su casa para que tome sus pastillas.
“Me quedé en la minivan junto a la persona que me retenía para que no me moviera del lugar, indicándome tranquilízate, ya no llore, colabore, eso es lo que hubiera hecho la otra vez y no hubiera pasado nada. Me dijo que ya lo iban a dejar trabajar, que cualquier cosa que lo llamaran”, narró la madre del denunciante.
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