La tercera ola del coronavirus (COVID-19) ha afectado, en una gran mayoría, a las personas que no habían sido vacunadas o que tenían comorbilidades, lo que los ha llevado a ser internadas en las unidades de cuidados intensivos (UCI) de los hospitales.
Un reportaje de Cuarto Poder evidenció la diferencia que hace la vacuna en la UCI del Hospital Emergencia Ate Vitarte, en el contexto de la tercera ola. Por un lado, las personas con sus dosis completas afrontan el contagio con una afectación leve y con tratamiento en casa.
En el caso de los no vacunados, las tomografías y radiografías muestran el avance de la enfermedad. En el informe periodístico se indicó que los médicos reconocen al coronavirus porque crea un efecto al que llaman opacidad del vidrio esmerilado, una especie de velo grumoso que enferma al pulmón y lo hace en cuestión de días.
En el informe periodístico se contó el caso de tres hermanos que llegaron al mencionado hospital a inicios de año con síntomas de COVID-19. Dos de ellos, debidamente vacunados, fueron dados de alta y con tratamiento en casa debido a que solo desarrollaron síntomas leves, sin embargo, el tercero de ellos, de 42 años, no estaba vacunado y el virus afectó el 30% de sus pulmones, lo que le impedía respirar y le provocaba un intenso dolor de espalda.
Además, se remarcó que el 70% de las pacientes que estaban internados en la UCI del Hospital Emergencia Ate Vitarte no estaba vacunado.