La Municipalidad de Pueblo Libre, a través de la Subgerencia de Fiscalización y Sanciones Administrativas, clausuró el local de KFC, ubicado en la Av. Bolívar N°1397, tras constatar que el establecimiento no cumplía con una serie de medidas sanitarias, en el reinicio de actividades del servicio de delivery en medio de la pandemia por el coronavirus (COVID-19).
Fiscalizadores e inspectores sanitarios comprobaron que, en el local de la cadena de comida rápida, tenía de canaletas con exceso de suciedad, donde se evidenciaba la acumulación de residuos y la falta de limpieza diaria. A esto se suma la presencia de óxido en las ranuras ubicadas en el área de producción de la tienda comercial.
También se detectó que los anaqueles y el piso de la cámara de refrigeración, destinada para la conservación de productos, se encontraba sucia y desprendía malos olores, los mismos que podrían impregnarse en los insumos que iban a ser utilizados para la elaboración de los pedidos del restaurante ‘fast food’.
En otro momento de la inspección, el personal municipal encontró que el área de producción del establecimiento, ubicado en el segundo piso del local, operaba sin contar con un tacho adecuado para el volumen de producción, además de ser notoria la falta de limpieza en el recogedor y jalador del área, así como en el piso y la escalera del lugar.
Asimismo, se constató que, en el almacén de insumos, había presencia de humedad, además de cajas con productos colocadas en el piso, sin cumplir con las condiciones de acopio dispuestas por la autoridad municipal sanitaria. De igual forma, se encontró que la balanza utilizada para el peso de los insumos estaba sucia y contenía restos de harina y polvo, mientras que, en el techo del área de producción, una compuerta permanecía abierta, generando la posible contaminación de los alimentos.
De otro lado, fiscalizadores municipales constataron que el establecimiento no cuenta con suficientes casilleros para que los trabajadores almacenen sus artículos personales, por este motivo, diferentes mochilas del personal se encontraban aglomeradas dentro de bolsas, las mismas que se hallaban junto con bebidas almacenadas para el consumo de los clientes.
El ingreso del establecimiento, la alfombra sanitaria dispuesta para la desinfección del calzado de los colaboradores y usuarios del servicio de reparto a domicilio, no se encontraba correctamente implementada, lo que generaba rastros de suciedad cuando el personal hacía uso de dicha superficie.
Ante lo expuesto, el personal municipal procedió a actuar de acuerdo a lo establecido en la Ordenanza 556-MPL, sancionando al local con una multa correspondiente al 20% de una UIT, ascendiente a S/860 soles, por no cumplir con las medidas sanitarias dispuestas a nivel local, además de disponer el cierre temporal del establecimiento. En ese sentido, el local podrá volver a operar una vez que haya subsanado todas las observaciones realizadas por personal del municipio.