Llevan 33 días desaparecidos y sus padres mantienen la esperanza de encontrarlos con vida en alguna isla o pueblo de Ecuador o Perú. (Foto: Correo)
Llevan 33 días desaparecidos y sus padres mantienen la esperanza de encontrarlos con vida en alguna isla o pueblo de Ecuador o Perú. (Foto: Correo)

“Mis hijos me piden que los rescate”, dice llorando María Consuelo Yovera Plácio, madre de tres de los cinco pescadores desaparecidos en Chimbote hace 33 días. Ella suplica a las autoridades la apoyen para continuar con la búsqueda de sus hijos Jorge Camacho Yovera (30), Josué Camacho  (17) y Adderly Camacho (26), en Ecuador y Perú.

“Yo he soñado con mis hijos y me dicen que los rescate, me dicen que no los deje de buscar, que están vivos. Yo tengo la esperanza que encontraré a mis hijos con vida porque tienen bastante comida, mi corazón me lo dicta, mi corazón de madre no se equivoca y mis hijos siguen con vida, tengo fe y siento que siguen con vida, solo esperan que yo los rescate, pero ya no sé dónde más buscarlos”, repite llorando desconsoladamente María Consuelo.

Agrega que, junto a su esposo, Jorge Camacho, recién regresaron de Ecuador tras buscar intensamente a sus hijos por diferentes puertos, pero sin resultados positivos.

“Hasta el momento no sabemos nada de ellos. Recién regresamos de Ecuador porque las autoridades marítimas nos dijeron que la corriente los arrastró al norte y hemos estado en Salinas, Manta, Santa Rosa y otros puertos, pero nada. Mañana otra vez me iré a buscarlos a Cancas, Zorritos, porque no dejaré de buscarlos”, agregó con voz entrecortada.

Criticó que las autoridades solo los buscaron seis días con helicópteros y embarcaciones. “Solo seis días me los buscaron, nosotros seguimos buscándolos, hacemos actividades y pedimos colaboración, pero lamentablemente aún no los encontramos. Necesitamos dinero para contratar un avión o una embarcación”.

Agregó que llevan 33 días desaparecidos, pues naufragaron el 10 de marzo.

Según el comunicado de la Capitanía de Puerto de Chimbote, cinco pescadores piuranos naufragaron desde el 10 de marzo a consecuencia del hundimiento parcial de su nave.

Los jóvenes habían hecho una balsa improvisada con bidones, corchos y palos.

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