Piura: 30 años de cárcel le esperaría al “Clan Marchena”

Una pena de 30 años de cárcel les esperaría a los alcaldes de Ayabaca, Baldomero Marchena Tacure, y de Lagunas, Humberto Marchena Villegas, por los presuntos delitos de colusión agravada y organización criminal como presuntos cabecillas del “Clan Marchena”. En la última audiencia, ambos se mantuvieron en silencio y uno de los empresarios procesados llorando suplicó su libertad y directamente acusó a Baldomero Marchena Tacure de “utilizarlo”.

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Audiencia

Durante la audiencia para determinar si se dicta o no prisión preventiva a los alcaldes de Ayabaca y Lagunas, integrantes de la presunta organización criminal el “Clan Marchena”; el fiscal anticorrupción de funcionarios de Sullana, Luis Ramos Rioja, afirmó que les esperaría una pena de 30 años por los delitos de colusión agravada y organización criminal, por lo tanto deberían ser encarcelados por 36 meses mientras continúan las investigaciones pues se corre el riesgo que huyan.

“(…) sobre todo en el caso de los presuntos cabecillas (Baldomero y Humberto Marchena) no existe otra medida (prisión preventiva) más idónea porque con el poder económico de este clan y con el conjunto de personas vinculadas por familiaridad una medida distinta, como por ejemplo la detención domiciliaria, pondría en peligro, por más que nos vengan a decir que van a tener seguridad y que la policía es responsable de custodiarlos, no existe arraigo domiciliario. Al ser presuntos cabecillas, no existe la menor garantía y sabiendas la fuerte posibilidad superior equivalente a los 30 años de pena privativa de la libertad que les correspondería por los delitos que habrían cometido”, señaló Ramos Rioja frente al juez del Juzgado de Investigación Preparatoria Supraprovincial Transitoria de Corrupción de Funcionarios de Sullana, Jorge Andrés Nole Socola.

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Silencio

Asimismo, hay que resaltar que durante la última sesión de audiencia del jueves pasado, a pesar que el juez Jorge Nole Socola les dio la oportunidad a todos los detenidos para hacer uso de la palabra; sin embargo, ni Humberto Marchena Villegas ni Baldomero Marchena Tacure hicieron uso de la palabra, es decir, siguieron guardando silencio ante los graves cargos que pesan sobre ellos y la condena de hasta 30 años que les podrían imponer por los presuntos delitos cometidos durante varios años en la provincia de Ayabaca.

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Culpa

Además, en esta audiencia, el detenido Guillermo Valle Tocto cuando hizo uso de la palabra y entre lágrimas culpó al alcalde de Ayabaca, Baldomero Marchena Tacure, de haberlo utilizado para formar una empresa y haberse beneficiado con el uso de la misma y no dudó en señalarlo como responsable de todo los hechos que se le imputaban y que lamentablemente confió en él.

“(...), le pido con el corazón en la mano, soy un productor que producto de mi ignorancia fui utilizado y estoy en esta situación, le pido por favor dejarme llevar en libertad este proceso. Quien le habla es un agricultor que toda la vida he sembrado menestras y maíz, y son testigos de ello todas las personas que me conocen y las personas que llegaron el 4 de octubre (día de la detención) que no me encontraron nada de dinero ni bienes de valor, solo encontraron mi cosecha, tengo que salir a vender mi cosecha porque mi familia depende de mi señor juez, tengo un niño pequeño que es especial que necesita mucho de mí, yo trabajo. Desgraciadamente, Baldomero Marchena, sabiendo de mi trabajo, me dijo para crear estas empresas para mejorar, lo que he ganado es este problema… me ha utilizado,…he tenido que recurrir a familias, préstamos para poder quedar bien con la Sunat, no me rehúso a colaborar con la justicia, necesito de mi libertad para poder trabajar y cumplir con la ley, se lo pido, ruego, señor juez, tenga en cuenta este pedido”, dijo llorando Valle Tocto.

Su abogado defensor, David Panta, también pidió se le dicte comparecencia simple o con restricciones pues su vida e integridad peligran.

“En la persona de Valle Tocto no calza el peligro de obstaculización, él no ha ido a ningún despacho, por el contrario, por principio de humanidad hay que resguardar su vida, integridad, libertad para que continúe apoyando en todo el proceso”, dijo el abogado Panta.