El campus de Piura fue incautado el pasado 12 de abril, como parte de las investigaciones contra Joaquín Ramírez, por el presunto delito de lavado de activos
El campus de Piura fue incautado el pasado 12 de abril, como parte de las investigaciones contra Joaquín Ramírez, por el presunto delito de lavado de activos

Completamente destrozados y desmantelados se encuentran los laboratorios del local de la filial de la Universidad Alas Peruanas (UAP) en Piura, el cual fue incautado el pasado 12 de abril por la Fiscalía y Policía, en el marco de las investigaciones contra Joaquín Ramírez, por el presunto delito de lavado de activos. Actualmente el local está bajo la custodia del

Se conoció que los laboratorios de biología, química y microbiología, consultorios dentales y sets de televisión, entre otros, modernizados como parte del proceso de licenciamiento, han sido destrozados y prácticamente han desaparecido de la UAP.

Se sabe que se han destrozado chapas, picaportes y cableado eléctrico y hay daños en la infraestructura de la institución universitaria.

El director general de la filial Piura de la UAP, Alejandro Pérez Balarezo, precisó que como parte de la modernización de la universidad para recibir el licenciamiento de la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu), la nueva administración invirtió cerca de S/8 millones.

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“Como parte de este proceso, la sede de Piura fue completamente modernizada. Se trata de un local de 15 hectáreas, con ambientes modernos y equipados. Pero hoy vemos con indignación que no solamente está muy deteriorada porque no se le ha hecho ningún tipo de mantenimiento, sino que además ha sido canibalizada”, declaró Pérez.

La autoridad universitaria precisó que se han robado los tableros eléctricos, las mamparas de los laboratorios y hasta los picaportes de las puertas e inclusive han destruido las áreas verdes, las áreas comunes y de recreación están completamente desmejorados. “En general, todos los ambientes se encuentran en condiciones deplorables”, recriminó.

La autoridad universitaria agregó que el patrimonio de la UAP había sido depredado por la familia Ramírez y cuando la Fiscalía dispuso la intervención de los inmuebles de la universidad, ya se hallaba bajo la gestión de una nueva administración.

“Por eso, nosotros estamos seguros de que la justicia nos dará la razón y que nos devolverán la sede. Pero ¿quién va a responder por todos los daños? Le entregamos a Pronabi locales modernos y nos van a devolver escombros. ¿Quién se hará responsable?”,  subrayó la autoridad universitaria.

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