Julio Cevallos, una gloria viviente del club Atlético Grau en Piura

Julio Cevallos, el popular "Algarrobo", junto a sus compañeros luego de ganar la Copa Perú 1972.

Actualizado el 05/06/2022, 08:14 a.m.

Julio Cevallos Morán, aquel fornido defensa de Atlético Grau llamado “el algarrobo”, era un roble, como un tronco de árbol y supo ganarse el cariño de los hinchas piuranos. Por su lado podía pasar el jugador pero no la pelota, o bien la pelota, pero no el jugador, y es que Julio era impasable, sudaba la camiseta en las tardes goriosas que le tocó defender al cuadro de sus amores.

Hoy alejado del fútbol y con problema de ceguera, a sus 77 años, recuerda su paso por este club, que hoy día, cumple 103 años de creación, momentos inolvidables que le tocó vivir en el equipo donde imponía mucha fuerza y coraje.

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GARRA Y PUNDONOR

“Comencé jugando en el San Lorenzo en la segunda división, más tarde Raúl “Perú”, me llevó al Alejandro Villanueva, luego jugué en el Escudero y don Orlando Balarezo me jaló al Grau, en aquel entonces pagó mi transferencia 200 soles.

Asimismo nos dice, “es en el año 1972 con el Grau, que ganamos la Departamental y luego la Final de la Copa Perú y ascendidmos a la Profesional”.Hoy al cumplirse medio siglo de aquella epopeya, con nostalgia recuerda a Rolando Jiménez, Inocencio Carmen Grau, Manuel “doctorcito” Mora, Manuel “Meleque” Suárez, Noé Rojas, Toribio Peña del Rosario, José “Quimbo” Córdova, Manuel “Chochas” Zapata, Carlos “Jefe” Mendoza, Reynaldo Rojas, entre otros, dirigido por el “profe” Guillermo Quineche Gil.

Luego su mente evoca los recuerdos cuando jugó con estadio lleno contra el Alianza Lima y Universitario, “Era un loquerío el estadio, las barras alentaban sin cesar, eramos un equipo aguerrido, que sudaba la camiseta, había mucho sacrificio, se ponía corazón, no como ahora”.

SE PERDIO ESA MÍSTICA

Jugó diez años continúos en el equipo de sus amores, el cual lo recuerda, pero como dice las distinciones son solo trofeo o un diploma, “puro cartones”, cuando lo que necesita es apoyo económico, ya que debido a su problema visual no puede trabajar, “nosotros dejamos todo por defender la gloriosa camiseta del Grau”.

Opinando sobre el equipo de hoy, manifiesta que le falta esa mística aguerrida que tuvo de antaño, “el equipo está de arriba para abajo, le falta coraje, pundonor, garra, esa mística, no se defiende a capa y espada como antes, pero todos queremos que con el paso de los partidos nos brinde alegrías y así siga conservando la categoría”.

Entre los actos programados por el club albo para celebrar esta efemérides, Hoy domingo habrá una misa a las 11:00 am, en la iglesia Catedral y una hora después una romería al cementerio San Teodoro.