Tras varias semanas de descenso de los casos del nuevo coronavirus, en los últimos días de noviembre se ha registrado un aumento en la cifra de muertos y contagios por COVID-19, según los reportes epidemiológicos de la Dirección Regional de Salud de Piura (Diresa).
ESTADÍSTICAS
A ello se suma, que en el registro del Sistema Informático Nacional de Defunciones (Sinadef), Piura a la fecha tiene 10,101 fallecidos (por diversas causas) y la Diresa tiene 2,688 muertes confirmadas a consecuencia del nuevo coronavirus. En 25 días del mes de noviembre, Piura tiene 567 fallecidos registrados en el Sinadef.
De acuerdo a Sala de Situación COVID-19 en Piura de la Semana Epidemiológica N° 48 -2020 (al 23 de noviembre), la región registra 2688 fallecidos, siendo el distrito de Piura el que registra el mayor número de defunciones con 439, seguido de Sullana con 283, Castilla (225), Pariñas (127), Paita (253), Veintiséis de Octubre (173) y Chulucanas con 286.
Además, al 23 de noviembre ya se registran 74,517 casos positivos, 186 casos más que los registrados un día anterior (74,331). Los distritos con mayor incidencia de casos confirmados son Piura, Sullana, Castilla, Pariñas, Paita, Veintiséis de Octubre y Chulucanas.
Y a esa fecha, hay 17 personas internadas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y 73 hospitalizados en el nosocomio Santa Rosa de Piura por este mal, 4 están en UCI de la clínica Miraflores y 6 en UCI del Hospital Privado.
Precisamente, el director regional de Salud, Víctor Távara, explicó que en la última semana epidemiológica aumentó el porcentaje de positividad al 30%, a pesar que semanas anteriores disminuyó al 25%.
“Nuestra positividad, que hace seis semanas estaba en 25%, progresivamente ha retornado a la que tuvimos por mucho tiempo, muy cercana al 30%, eso significa que de 100 personas, 30 saldrían positivos”, explicó Távara.
La autoridad precisó que las muertes también han aumentado, pues la última semana ha registrado 16 defunciones más con relación a la semana anterior.
“Insistimos que la mejor manera de alterar la curva de casos positivos y fallecidos es el uso de mascarilla, distanciamiento, lavado de manos y evitar aglomeraciones (…). Hay un incremento discreto de muertes y eso nos exige a todos participar activamente de las actividades anticovid que buscan protección y prevención”, manifestó Víctor Távara.
El funcionario agregó que la mayoría de muertos por esta enfermedad son los mayores de 60 años (1,917 casos). Agregó que en la provincia de Morropón también se registró un aumento de fallecidos por esta enfermedad.
Távara exhortó a la población que ante cualquier síntoma, como fiebre mayor de 38 grados por dos días, dificultad para respirar, desorientación, dolor de pecho y coloración azul alrededor de los labios, deben acudir inmediatamente a un centro de salud.
NADA DE FIESTAS
La autoridad persuadió a las instituciones públicas y privadas a ser escrupulosos en la evaluación a las personas que ingresan a sus locales.
“Las aglomeraciones son el punto de partida para la transmisión y agravamiento de la curva”, dijo Távara.
Recalcó que no es recomendable realizar fiestas de Navidad y de Año Nuevo.
“No están recomendadas porque el escenario no nos permite, es un escenario de riesgo, no podríamos cometer, como piuranos, ese error de realizar una fiesta, porque tendríamos en enero con toda seguridad un aumento sustancial de casos. La abstención de reuniones justamente nos dará tranquilidad para así superar la pandemia”, recalcó Távara.
Precisó que en la reunión del Consejo Regional de Salud, se acordó solicitar al Minsa que se mantengan los hospitales temporales ante una eventual segunda ola.
FACTORES
El secretario del Colegio Médico de Piura, Crhistian Requena, afirmó que el aumento de casos se debe que no hay un uso correcto de la mascarilla, ni cumplimiento a cabalidad de los protocolos sanitarios en los lugares públicos.
“Hemos evidenciado que no se cumple a cabalidad los protocolos sanitarios. No usan mascarillas correctas, en el transporte público no se usa los protectores faciales “, afirmó Requena.
Insistió que es importante se realice el estudio de seroprevalencia.
De otro lado, precisó que no existen pruebas rápidas para el diagóstico de las personas y, además, no hay una entrega oportuna de EPP (equipos de protección personal) al personal de salud, esto último pondría en riesgo a todos.
Exhortó a que se cumpla a cabalidad el “Plan” ante una segunda ola del COVID-19.
“Esperemos que no solo quede escrito en un papel, sino que se cumpla, debería garantizar la salud de la población, médicos y profesionales de la salud. Al viernes de la semana pasada no había una entrega continua, requerida y oportuna de EPP”, recalcó.
El médico subrayó que no se debería bajar la guardia si se registra una disminución de casos. “No debemos bajar la guardia en medicamentos, EPP, oxígeno, capacitación, número de personal para atención de pacientes”, dijo.
Para el epidemiólogo Edward Pozo, el aumento de casos también es por el “descuido” de la población y de las acciones de prevención.
“Todo dependerá de la población y de las restricciones que se puedan dar ante la llegada de las fiestas de fin de año, donde se registrarán viajes, aglomeraciones en centros comerciales, reuniones familiares y sociales, entre otros”, finalizó Pozo.