Luego de ser rescatados con vida, uno de los dos ingenieros del Proyecto Café del Gobierno Regional de Puno narró que debido a la corriente y las rocas que había en el río Inambari, ellos decidieron descender del bote de cámara de llantas y avanzar caminando. En ese momento, se desprendió una cuerda y el bote, piloteado por el tercer profesional, fue arrastrado por el agua.
Eliazar Paredes Paredes, en declaración a un medio de comunicación de San Gabán, relató que junto a sus compañeros Alan Molina Benavente y Álvaro Zegarra Román, se desplazaban en un bote motorizado de cámara de llantas.
Sin embargo, en una zona observaron piedras, por ello decidieron bajar y avanzar caminando. “En un lugar, que no recuerdo su nombre, hemos bajado y había una roca, donde queríamos pasar caminando porque había torrentada, en el cual las pequeñas soguillas que teníamos se han roto y el agua se llevó el bote, quisimos recuperar corriendo y no se pudo”, narró Eliazar.
Añadió que “más adelante encontramos su ropa, polo y poncho de plástico (del piloto Álvaro Zegarra), al parecer se lanzó al río para recuperar el bote porque teníamos entendido que nadaba bien. Teníamos la esperanza de encontrar con vida”, expresó.
Último adiós
Mientras los parientes de los otros dos ingenieros están felices al haber encontrado con vida, los familiares de Álvaro Zegarra pidieron que se esclarezca el caso. Fue en medio del último adiós dieron al infortunado profesional en el centro poblado de San Ignacio, en el distrito de Putina Punco-Sandia.
“Mi hijo tenía muchas aspiraciones como profesional. Deja en la orfandad un menor de 7 años y su segundo hijo venía en camino porque su pareja estaba gestando” expresó el padre del fallecido.