Un taxista de la empresa 114 fue víctima de la delincuencia en la madrugada de hoy en el sector “Ciudad Perdida” del Cercado y el interruptor o botón para hablar (conocido como PTT o petete) de su equipo de comunicación que tienen los radiotaxis le salvó la vida, cuando dos “cogoteros” que fingieron ser pasajeros trataban de asfixiarlo y luego llevarse el vehículo.
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Solicitan servicio
El chofer Pedro Carrillo Benegas contó que a las 4 horas aproximadamente se hallaba a bordo de su auto Toyota Yaris rojo de placa D7E-276 en las inmediaciones del mercado 1º de mayo en el Centro Poblado Augusto B. Leguía y dos varones le solicitaron un servicio de taxi, pero cuando el vehículo se desplazaba por la parte posterior del colegio particular William Prescott, en el sector “Ciudad Perdida”, los pasajeros sacaron a relucir sus instintos criminales.
Ataque en banda
Carrillo dijo que el pasajero que estaba en el asiento posterior le atacó, apretando con su cuello con los brazos y con la finalidad de que pierda el conocimiento, mientras el otro asaltante que estaba en su costado (asiento del copiloto) le daba golpes.
Llega ayuda
El taxista sacó fuerzas y logró manipular el “petete” de su equipo de comunicación que está enlazado con la central o base de la empresa y otros taxis, logrando que sus compañeros se dieron cuenta que corría peligro; de forma inmediata varios taxistas guiados por el sistema GPS del radiotaxi D7E-276 se dirigieron al sector de “Ciudad Perdida” en auxilio de su compañero, pero los asaltantes al verse descubiertos lograron escapar por unas chacras, amparados en la oscuridad.
Pedro Carrillo fue asistido por sus compañeros, luego acudió a la comisaría Augusto B. Leguía para formalizar una denuncia por delito contra el patrimonio.
