La estudiante de medicina Valeria Irinia Alarcón Mamani (21) decidió ayer por la tarde declarar ante los agentes de Homicidios del Depincri y representante del Ministerio Público sobre su autoría en el presunto delito de parricidio en agravio de su madre Beatriz Mamani Maquera (55) hallada muerta por “cogoteo” en la avenida Industrial Nº 502A de la Junta Vecinal Leoncio Prado.
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responsabiliza a enamorado
Los investigadores del caso dijeron que la joven Valeria respondió a una serie de preguntas del instructor policial en presencia del fiscal José Vega Pilco, un fiscal de Familia y el abogado de la investigada. Narró lo sucedido la noche del domingo y madrugada del lunes 10 en la vivienda y señaló que su enamorado, el adolescente de iniciales C.C.L (17), fue el autor material del crimen, negando ella toda participación del hecho.
La noche de ayer Valeria Alarcón Mamani y el menor C.C.L. pasaron de la PNP al Ministerio Público. De la sede del Depincri fueron trasladados a la carceleta de la Policía Judicial. Después el Poder Judicial una audiencia de prisión preventiva contra Valeria Alarcón Mamani por el presunto delito de parricidio a realizarse mañana (viernes 14) en el Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria de Tacna que está a cargo de la jueza Sonia Marín Valdivia.
Irá a centro juvenil
Sobre el adolescente de 17 años, el juez de Familia René Aguilar Lasteros dispuso su internamiento preventivo en un centro juvenil por encontrarse en un proceso de infracción a la ley penal en la modalidad de homicidio calificado. El 5 de mayo, a las 10 horas, C.C.L. debe asistir a una audiencia por videoconferencia para el esclarecimiento de los hechos por la muerte de Beatriz Mamani Maquera.
Muerte en vivienda
Como se informó, tras el hallazgo del cadáver de la docente Mamani, la Valeria inicialmente refirió a la PNP que presuntos delincuentes habían ingresado a la casa y agredieron a su madre hasta causarle la muerte. Las contradicciones de la joven en esa primera declaración, testimonios de vecinos y del enamorado menor de edad, sirvieron para que se descarte el robo como móvil del asesinato.
Después en la casa del menor de 17 años hallaron algunos bienes supuestamente robados a la docente. El adolescente también participó el martes en una reconstrucción sobre su presencia en la casa de la docente el día del crimen.