Más de veinte agentes provistos de implementos de rescate ayudaron a cruzar la torrentosa quebrada Fernández a dos profesores y una niña que habían estado extraviados por más de siete horas en un cerro del distrito de Canoas de Punta Sal, en la región Tumbes, para luego llevarlos al centro de salud donde recibieron atención médica.
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El jefe del Frente Policial de Tumbes, Javier Manuel Gonzáles Novoa, destacó la labor de los agentes participantes de la comisaría de Cancas, Unidad de Salvamento Acuático y Unidad de Rescate, quienes tras cruzar la corriente de agua tuvieron que caminar un largo tramo para llegar al pueblo Catalinas donde estaban los dos docentes y la menor que ya habían sido encontrados por una familia y los había cobijado en su casa.
Explicó que Nancy Quispe Terrones y su hija, Luis Felipe Villegas se encontraban extenuados y deshidratados y con algunas hematomas en el cuerpo tras caminar ayer por varias horas ante un calor intenso, por eso tras cruzar la quebrada torrentosa las mencionadas personas fueron trasladadas por personal de la Policía al establecimiento de salud de Cancas.
Tras una exhaustiva revisión médica, los dos adultos y la niña a bordo de un patrullero fueron transportados desde Canoas de Punta Sal hasta la ciudad de Tumbes donde viven sus familiares.
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“La policía está al servicio de la comunidad y estamos trabajando no solo en el tema de seguridad sino en apoyo ante la emergencia por las lluvias “, precisó la autoridad policial.
OCHO PERSONAS EMPRENDIERON TRAVESÍA
El director de la institución educativa N°085 Normans Simmons de Boyland, Juan Francisco Chiroque Ramos, contó que el jueves un total de siete docentes y la hija menor de una profesora decidieron pernoctar en la localidad de Cerezal debido a las intensas lluvias.
Ese mismo grupo de personas, ayer a las ocho de la mañana, salió para bajar a la vía Panamericana Norte a fin de abordar algún vehículo que los traslade al distrito de Tumbes.
En ese momento, la quebrada Fernández se activó por lo que dos profesores lograron cruzar la corriente de agua con apoyo de unas cuerdas llegando hacia el otro extremo.
Los otros cinco adultos y la menor optaron por avanzar su camino a través de los cerros; sin embargo, luego de siete horas no se sabía nada de su paradero, por lo que los profesores Gorki Mendoza y Emmis Preciado, quienes habían llegado hasta la bomba de agua del caserío de Barrancos decidieron alertar sobre este hecho al director del plantel, así como a la comisaría de Cancas y Serenazgo de la Municipalidad Distrital de Canoas de Punta Sal.
Tras conocer del hecho, pobladores de la zona colaboraron con la búsqueda. Un familia de la localidad de Catalinas logró dar con el paradero del resto de la delegación que estaba perdida.
Es decir aparecieron Nancy Quispe Terrones y su hija, Luis Felipe Villegas, Blanca Quiroz, Froilan Aguilera y Herles Saavedra, quienes estaban agotados por caminar un largo tramo en un intenso calor que hubo ayer pasado el mediodía. De este grupo los tres últimos docentes pese al cansancio decidió continuar su recorrido a Tumbes. El resto fueron trasladados por los policías.
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