Javier Reyna Gámez fue hallado culpable del delito de violación sexual en agravio de una menor, de solo 7 años a quien, además, amenazaba para que no denuncie el vejamen.
Javier Reyna Gámez fue hallado culpable del delito de violación sexual en agravio de una menor, de solo 7 años a quien, además, amenazaba para que no denuncie el vejamen.

A 35 años de prisión condenó el a un hombre que abusó sexualmente de una niña en la provincia de Zarumilla. El agresor se encuentra recluido en el donde venía cumpliendo prisión preventiva.

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Tras una exhaustiva investigación de la Segunda Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Zarumilla, a cargo de la fiscal Karito Cholán Castillo demostró la culpabilidad del procesado presentando diversas pruebas ante el tribunal.

Es así que, en adelanto de fallo, el Juzgado Colegiado, que conforman Edgar Izquierdo Ruiz, Juan Carlos Valdiviezo Gonzáles y Richard Omar Rueda, por unanimidad encontró responsable a Javier Alberto Reyna Gámez, como autor del delito contra la libertad sexual en la modalidad de violación sexual en grado de tentativa en agravio de una menor de siete años.

Por tal motivo, le impuso 35 años de pena privativa de la libertad de carácter de efectiva, la misma que se computará desde su detención el 28 de mayo del 2022 y vencerá el 27 de mayo del 2057.

Además de un pago de reparación civil de 7 mil soles a favor de la víctima. Asimismo, el tribunal dispuso el sometimiento a tratamiento terapéutico, al sentenciado, previo examen médico o psicológico, que determine su aplicación, a fin de facilitar su readaptación.

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Los hechos

Según las investigaciones, el suceso se produjo el 23 de julio del 2018, cuando la menor tenía 7 años y el agresor Javier Alberto Reyna Gámez aprovechaba la cercanía que tenía con la familia.

Este hecho de abuso sexual fue descubierto por la hermana de la víctima quien dio aviso a un familiar este a su vez denunció ante la comisaría de Zarumilla.

De la carpeta fiscal se conoce que el sentenciado amenazaba a la niña si contaba lo sucedido la iba a matar. Además que había ultrajado a la menor hasta en dos oportunidades anteriores.

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Prófugo

A consecuencia de esta denuncia, Javier Alberto Reyna Gámez, tenía una requisitoria vigente por el delito de violación desde el Juzgado Penal Colegiado de Tumbes y estaba en calidad de no habido.

El 28 de mayo pasado, durante un operativo preventivo de control de identidad que se realizó en la intersección del jirón Santa Cruz y prolongación Leoncio Prado, en Chimbote, en la región Áncash, personal policial de la Unidad de Emergencia (Uneme) intervino a este sujeto cuando viajaba en un vehículo particular. Se le solicitó su identificación y esta fue cotejada con el sistema de requisitorias que arrojó positivo por un mandato de orden de captura por contumacia para que responda por un juicio oral por el delito de violación sexual en agravio de una menor de edad.

Luego, Javier Reyna fue traído a Tumbes donde fue recluido en el penal de Puerto Pizarro hasta que se emitió su sentencia de 35 años.