“Bunka significa cultura en japonés y esta nueva propuesta lo llevará por una interesante y divertida interpretación de la vida nocturna en Japón”
“Bunka significa cultura en japonés y esta nueva propuesta lo llevará por una interesante y divertida interpretación de la vida nocturna en Japón”

El reconocido chef Hajime Kasuga es Embajador de Buena Voluntad de la Cocina Japonesa y representa la cocina nikkei en todo el mundo. Kasuga no solo cocina en el restaurante Hanzo de San Isidro, sino también hizo asesorías gastronómicas en nuestra capital y en restaurantes en distintas partes del mundo, las últimas lo han llevado a Miami y Barranquilla, Colombia.

Hoy apuesta por Bunka Bar, un espacio nocturno donde no sólo se disfruta de buena comida nikkei con una onda más casual y relajada, sino de agradable música y una carta bar realmente interesante elaborada por Damián Vargas y donde el sake, el whisky japonés y la cultura del país nipón son las estrellas.

El espacio cuenta con distintas áreas donde disfrutar de esta divertida experiencia: una barra imponente y elegante que es el centro de todo lo que sucede en el local, un amplio salón principal, un pequeño privado y mesas laterales para el que busca un poco más de calma. La carta tiene como propuesta central la cocina nikkei y platos clásicos de la cocina japonesa tradicional. Nigiris de la casa, tempuras, gyozas, ostras, bocados pequeños y sabrosos pensados para acompañar cada bebida.

PLATOS ESTRELLA. Nuestra experiencia comenzó con un elegante plato de sashimi moriawase, donde el producto es la estrella, atún, conchas frescas y dulces, pulpo y salmón. Se presenta sobre nitrógeno líquido, todo un espectáculo. Seguimos con las ostras, muy frescas, servidas con ponzu y yuzu, decoran el plato caviar de trucha que le dan una textura interesante. Las gyozas están rellenas de pato y foie, los taquitos nikkei son para que cada uno arme el suyo, vienen con cerdo, guacamole, kimchi y chimichurri oriental.

El nori shell está hecho con nori crocante, shari, entraña y chimichurri. Contundente y divertido, prepárese para chuparse los dedos. Prueben el chicken karaage, pollito frito dos veces al estilo coreano, crujiente y meloso, una delicia en cada bocado. Si lo suyo es el japonés tradicional, déjese llevar por los expertos, en Bunka el producto es de total calidad y podrá disfrutar cada uno de los platos que lleguen a su mesa. Los fondos son pocos pero contundentes, picaña Angus con mantequilla de Yuzu, una poderosa parrilla de mariscos con mantequilla Gochujang o unas suaves costillas de cordero, por mencionar algunos.

La barra es cosa seria, Damián Vargas ha realizado una propuesta donde los sabores de la cultura nipona se disfrutan en cada bebida, su inspiración son los whiskys y sakes japoneses y si quiere aventurarse a una interesante experiencia le sugerimos dejarse llevar. Algunas de las opciones de la casa son el Shigoto, elaborado com whisky, sésamo, vermut y chocolate; el Negroni Matcha, elaborado con ron y campari; o el shiitake a base del mismo hongo japonés, tequila, maracuyá y tónica de kion, suave y refrescante. La carta de bebidas es amplia e interesante, perfecta para maridar con los platillos de Kasuga.

El horario de atención es por el momento sólo nocturno, de lunes a jueves de 6pm a 12am y viernes y sábados de 6pm a 2am. Próximamente abrirán almuerzos