Al pequeño Dante Siebenhar le detectaron aniridia cuando tenía dos meses de nacido. (Foto: pixabay)
Al pequeño Dante Siebenhar le detectaron aniridia cuando tenía dos meses de nacido. (Foto: pixabay)

Cuando los médicos le dijeron a la mamá del pequeño Dante que su hijo padecía una rara enfermedad a los ojos, no imaginó la gravedad del asunto. Este bebé de 18 meses fue diagnosticado con Aniridia, un trastorno que genera que los ojos le ‘quemen’ cada vez que se acerca a la luz solar.

Esta patología afecta sobre todo al órgano visual, presentando estructuras oculares mal desarrolladas, la más evidente es la falta parcial o total del iris en ambos ojos.

Para mejorar su calidad de vida y evitar que su hijo se quede afectado por este mal, la mujer debe conseguir unos lentes de contacto especiales que reemplazan la ausencia parcial del iris, señala . Sin embargo, adquirir estos aparatos les resulta costoso.

“Cuestan más de 240 mil pesos (US$ 2140), no contamos con el dinero porque vendí todo lo que tenía cuando le compré el primer par de lentes”, señaló Rocío, madre del pequeño Dante Siebenhar.

Cuando el menor cumplió dos meses, su madre lo llevó a un control pediátrico en la Clínica del Niño de la ciudad de La Plata (Argentina), donde le detectaron la enfermedad. Para evitarle el dolor que sufría al exponerse directamente al sol, la mujer tuvo que colocarle los lentes de contacto a muy temprana edad.

“Los lentes que está usando se están por vencer y él no está viendo bien. Por eso, tenemos 30 días para poder conseguir unos nuevos y que mejore”, señaló Rocío, quien realizó una campaña a través de las redes sociales para que amigos y familiares le ayudaran a conseguir el dinero para un nuevo par de anteojos.

Dante debe cambiar los lentes de contacto una vez al año. (Foto: Facebook)
Dante debe cambiar los lentes de contacto una vez al año. (Foto: Facebook)

Además, comentó que los lentes, que se renuevan cada uno o dos años, lo ayudan a no encandilarse ni sufrir daños en la córnea.

Hasta hace unos días, la mujer había logrado conseguir 30 mil pesos; sin embargo, le faltaban 210 mil para llegar a la meta. Su caso se viralizó tanto en las redes que una óptica de La Plata se ofreció a donarlos.

“Estoy muy emocionada, no puedo creer que se hayan comportado de esta manera con Dante. Ahora él va a poder ver sin que le duelan los ojos”, señaló emocionada.

“Lo único que espero es que después de esto pueda conseguir un trabajo mejor para no tener que pedirle a la gente que me ayude”, indicó Rocío tras recibir la feliz noticia de que le regalaron las lentes.

¿Qué es la Aniridia?

Según detalló María Laura Bortman, médica oftalmopediatra del Servicio de Oftalmología del Hospital Italiano de Buenos Aires, la enfermedad Anirina “significa que está la ausencia del iris, que el iris no se desarrolló durante la gestación. El iris es una estructura que está adentro del ojo y lo que hace es limitar la entrada de la luz y al no tenerlo, la luz entra de forma directa y genera encandilamiento”.

Los lentes que Dante necesita funcionarían como “un iris falso”, que sirve para recubrir la pupila y así evitar que se lastime la córnea y el resto del ojo.

“En este caso serían claves para mejorar su vista, aunque no resuelven la enfermedad”, señaló la especialista.

Sin embargo, detalló que los lentes que utiliza Dante no curan la enfermedad y, por el contrario, la Aniridia puede provocar complicaciones como cataratas y tumores de riñón.

“Que la enfermedad tenga otras complicaciones no quiere decir que las lentes lo van a solucionar. Sí pueden evitar la fotofobia, acompañar la enfermedad y tratar los síntomas, pero no la curan”, indicó Bortman.

Una de cada 100.000 personas padece de Aniridia, según el portal .