Bangkok. [EFE]. Tailandia cumplió este miércoles 100 días sin registrar ningún contagio local de coronavirus, tras aplicar estrictas medidas como el cierre de las fronteras que le han permitido controlar la pandemia, aunque a costa de dañar la economía.
Las autoridades tailandesas anunciaron hoy ocho nuevos casos del nuevo coronavirus, importados de Estados Unidos, Australia y Japón, lo que eleva el total acumulado desde enero a 3.425, incluidos 58 muertos, y sitúa a Tailandia como uno de los países menos afectados del mundo por la pandemia.
Tailandia fue el primer país en detectar, en enero, un contagio de COVID-19 fuera de China, probable origen de la pandemia.
A pesar de su cercanía con el gigante asiático y de ser el principal destino de los turistas chinos, Tailandia se ha librado del gran incremento de infecciones de otros países como India, Estados Unidos o España, e incluso de las altas cifras registradas en naciones más cercanas como Indonesia (con 178.000 casos) o Filipinas (con 224.000).
El pasado marzo, el gobierno ordenó controles de movimiento, un toque de queda nocturno, el uso obligatorio de mascarillas en lugares como supermercados o transportes públicos y el cierre de las fronteras y de la mayoría de los negocios y oficinas, aunque no decretó un confinamiento estricto.
Las medidas empezaron a relajarse en junio, aunque en este momento las fronteras continúan estando cerradas para los turistas y el pasado 21 de agosto las autoridades decidieron ampliar por quinta vez la ley de emergencia hasta el 31 de septiembre.
El cierre de fronteras y la caída de la demanda exterior ha supuesto un duro golpe para la economía tailandesa, que entró en recesión al caer el producto interior bruto (PIB) un 12,2 % en el segundo trimestre del año, tras una contracción del 2 % en los primeros tres meses.
Según el pronóstico del Banco de Tailandia, el PIB perderá este año un 8,1 % respecto al año anterior, el peor dato económico desde la crisis financiera que asoló el país y gran parte del Sudeste Asiático en 1998.
Las autoridades han aprobado paquetes millonarios de ayuda para paliar los efectos económicos de la pandemia en sectores como el turismo, que este año recibirá un 80 % menos de visitantes que en 2019, cuando acogió a unos 40 millones.