El presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil, Alexandre de Moraes, valoró la “paz” que imperó en los comicios celebrados este domingo y aseguró que eso “demuestra la profunda voluntad democrática” de la sociedad.
Las elecciones presidenciales fueron ganadas por el exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva, candidato progresista que obtuvo un 48,2 %, frente al 43,3 % del presidente y líder de la ultraderecha, Jair Bolsonaro, ante quien deberá disputar una segunda vuelta el 30 de octubre próximo.
De Moraes también subrayó la “transparencia”, la “fiabilidad” y la “velocidad” del sistema electrónico de sufragio, que en poco más de cuatro horas permitió realizar el recuento de los cerca de 120 millones de votos que fueron emitidos este domingo.
Esa declaración fue interpretada como una nueva respuesta a la campaña de descrédito que Bolsonaro inició a mediados de 2021 y que mantuvo hasta esta misma semana, cuando volvió a insistir en que las urnas electrónicas propician los fraudes, pese a que nunca, desde su adopción en 1996, fueron objeto de una sola denuncia.
“La justicia electoral, atacada como fue, demostró este domingo su transparencia”, dijo el magistrado, en una rueda de prensa junto a la presidenta de la Corte Suprema, Rosa Weber, y el presidente del Congreso Nacional, Rodrigo Pacheco.
La abstención este domingo se situó en un 20,8 %, tasa similar a de las elecciones de 2018, y según De Moraes esa asistencia de los electores también “confirmó la confianza de los brasileños” en las urnas.
“Por todo esto, no creo que haya ya ataques mayores a la justicia electoral en la segunda vuelta”, sostuvo el magistrado, para aclarar que el TSE seguirá “igual de vigilante” en el nuevo proceso de cara al próximo 30 de octubre.
Fuente: EFE