Francisco Belaunde es analista internacional, docente de Política Internacional Europea en la USIL, magíster en Derecho Internacional y Europeo por la Universidad de Derecho de París II. (Foto: archivo GEC)
Francisco Belaunde es analista internacional, docente de Política Internacional Europea en la USIL, magíster en Derecho Internacional y Europeo por la Universidad de Derecho de París II. (Foto: archivo GEC)

Una vez que Trump se instale de nuevo en la Casa Blanca, ¿qué podemos esperar de su política hacia América Latina?

En general, para EE.UU., América Latina no tiene tanta importancia, pero México sí, porque por ahí llegan los inmigrantes. Además, hay un Tratado de Libre Comercio (TLC) con México y Canadá. Por sus políticas proteccionistas, nunca se sabe muy bien qué decisiones puede tomar Donald Trump (...). Él está preocupado con la competencia a nivel industrial. Nosotros (el Perú) tenemos un TLC con EE.UU. que es sobre todo de agroexportación (pero) no se podría descartar que algún productor en EE.UU. que esté preocupado por los espárragos o lo que fuera que viene del Perú haga “lobby” para buscar algún tipo de revisión del tratado.

¿Considera que sería más dura la postura frente a Venezuela?

No creo que vaya a cambiar mucho, pero sí la retórica. Cuando fue presidente por primera vez, se decía que podía lanzar un ataque militar, pero nunca lo hizo, y es complicado porque los norteamericanos no quieren tener más aventuras militares. Yo no veo que vaya a haber mucha diferencia por ese lado. Las sanciones ya existen. No hay mucho que se pueda hacer. Si no vas a intervenir militarmente, qué haces. Sancionas, aíslas políticamente, pero es lo que ya se está haciendo. No creo que vaya a haber un cambio más allá de la retórica.

Un punto sobre el que sí se ha referido en campaña es el de la guerra en Ucrania, y el apoyo militar y financiero que se le da. ¿Es Kiev el gran perjudicado en estas elecciones?

Ahí sí definitivamente va a haber cambios. Él está en contra de seguir apoyando a Ucrania. Tampoco se puede descartar que decida sacar a EE.UU. de la OTAN. Trump siente gran simpatía por (el presidente ruso Vladimir) Putin y eso también juega. Va a tener una relación conflictiva seguro con la Unión Europea. En su primer mandato, él decía que la Unión Europea había sido creada para perjudicar a EE.UU. y cosas por el estilo.

¿Se espera un cambio en torno a Medio Oriente?

Si bien EE.UU. apoya a Israel, (el presidente Joe) Biden quería frenar un poco lo que se hace en Gaza. Eso quizás termine con Trump y haya un apoyo mayor hacia Israel.

Otro punto es su postura sobre China. Ya en el primer periodo de Trump como presidente vivimos una guerra comercial entre potencias, ¿podemos esperar un escenario similar?

Para empezar, Biden mantuvo todos los aranceles del 25% que impuso Trump y los aumentó en algunos casos. En ese aspecto, la política de Biden no cambió mucho frente a la de Donald Trump. En donde sí puede cambiar es que él (Trump) piensa poner aranceles no solamente a China, sino también a otros países.

En su gestión anterior también se vio un quiebre en la lucha contra el cambio climático, incluso se retiró del Acuerdo de París.

Él no cree en eso. Quiere promover aún más la explotación gasífera, petrolífera. Posiblemente va a haber un cambio radical.

Un factor no menor es que los republicanos han ganado el Senado y avanzan en la Cámara de Representantes. ¿No preocupa la falta de contrapeso en el Congreso?

Va a tener todas las herramientas para hacer lo que quiere. Es peligroso porque se ha visto que es una persona que tiene posturas inquietantes para la propia democracia. Es una persona que no cree mucho en controles y balances, y nombra gente que le sea absolutamente leal y que podría ir incluso en contra del Estado de derecho.