Una mujer protagonizó un lamentable episodio en el transporte público en Buenos Aires, Argentina, cuando se negó a utilizar la mascarilla para evitar la propagación del COVID-19 y, por el contrario, se enfrentó a los demás viajeros que le solicitaban el uso de este artículo sanitario.
Según un video publicado en las redes sociales, la mujer se subió al colectivo y se sentó al fondo, pero cuando una viajera se percató que no llevaba puesto el tapabocas, le exigió su uso y ella respondió que “el dióxido de carbono es un tóxico utilizado en las cámaras de gas”.
“Tú usas bozal”, le cuestionó la mujer a la joven que le hizo el reclamo, según detalla Perfil. Otra persona que viajaba en la unidad le replicó que “estás chapa, anda al psiquiatra y que te trate, pero te estamos pidiendo con respeto que cumplas la ley”.
Al enfrentamiento se unió otro grupo de personas que le solicitaban la misma consigna, pero la mujer no daba su brazo a torcer y, en cambio, señaló que tampoco se había vacunado contra el coronavirus.
“Nunca me vacuné. Ustedes no tienen ni idea de lo que tiene la vacuna, que ni siquiera es una vacuna”, exclamó indignada.
Ante la negativa por protegerse y proteger a los demás pasajeros, un hombre le pidió bajar del vehículo o tendría que llamar a la policía; pero la mujer continuaba firme con su postura y señalaba que “no soy necia, decido respirar”.
El chofer tuvo que detener el autobús y llamó a una patrulla que estaba cerca de la avenida. La policía subió al vehículo y tuvo que intervenir en el asunto.
“Si bien tiene derecho a viajar, tiene que hacerlo conforme a las reglas”, señaló una de las autoridades, que la invitó a descender para que los demás puedan continuar con su viaje.
La mujer se negó en todo momento a bajar señalando que estaba en todo su derecho a usar el transporte público, pero los agentes policiales procedieron a bajarla de la unidad para que el colectivo pudiera continuar su curso.
Tal como detalló Perfil, el ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, señaló el pasado 7 de abril que la mascarilla seguirá siendo obligatoria en los espacios cerrados, ya que no existe evidencia científica que avale eliminar esta medida.