El viernes último el Congreso ha enviado al archivo tres mociones de vacancia contra la presidenta Dina Boluarte. Sin embargo, la jefa de Estado cometería un grave error si es que cree que este resultado a su favor es motivo para celebrar, pues esta vez ha tenido suerte de que estas iniciativas hayan venido de representantes de la izquierda aliada del golpista Pedro Castillo, lo que no generó mayores adhesiones.
La señora debería comprender de una vez que con mano propia está comprando todos los talonarios de la rifa para salir “ganadora”, es decir, está haciendo todos los “méritos” para que la vaquen. Sin duda ha estado jugando con fuego al no marcar distancia con su hermano Nicanor, que si bien ha sido liberado por el Poder Judicial, sin duda más adelante se verá en graves problemas judiciales.
Hoy que la suerte ha estado de su lado con el envío al archivo de las mocionas castillistas de vacancia, debería entender que si quiere sobrevivir al menos hasta fin de año, debería alejarse de gente dudosa como Wilfredo Oscorima y comenzar a preocuparse de forma decidida en al menos tres puntos vitales: seguridad ciudadana, salud y educación, lo que no será posible si no fomenta la inversión privada.
Si no es así, su anuncio de durar hasta el 2026 como en efecto dispone la Constitución, será apenas un lindo sueño que tendrá un duro despertar.
