Construcción del Colegio Garcilaso será retrasada
Construcción del Colegio Garcilaso será retrasada

El colegio Inca Garcilaso de la Vega, declarado colegio emblemático del Cusco, está siendo reconstruido.

Nadie pensó que tan importante decisión iba a causar tantas molestias e incomodidades a los educandos, que jamás habían pasado por una crisis similar. No sólo estudian en condiciones antipedagógicas, sino que la construcción de la nueva infraestructura demorará más de lo previsto por el retraso en el inicio de la ejecución.

La crisis se remonta a enero, cuando la dirección del colegio debía entregar en fecha determinada las instalaciones para la demolición; la entrega se dio con un mes de retraso porque no había lugar para que los garcilasianos y todos sus muebles sean "alojados".

A escasos días que inicie las labores a nivel nacional, recién la Dirección de Educación dispuso los espacios de otros colegios para instalar módulos prefabricados, los mismos que llegaron durante la primera quincena de marzo.

Garcilaso inició el año lectivo en abril, un mes después de lo previsto y en condiciones nada óptimas para el aprendizaje.

El campo recreativo del Instituto Túpac Amaru, en el distrito de San Sebastián, se convirtió en la sede del nivel secundario.

Los módulos que fueron instalados no cuentan con energía eléctrica, razón por la cual el turno tarde culmina sus labores a las 17:00 horas, cuando lo usual era a las 18:30. Si se toma en cuenta que una hora lectiva es de 45 minutos, entonces se están perdiendo 2.

Como si fuera poco, el servicio de agua no es permanente, pues tampoco tiene una instalación básica y la batería de servicios higiénicos dejó de ser salubre.

Durante el día, el sol recalienta la estructura de los módulos y el calor se hace insoportable; como no hay ventanas, a los profesores y alumnos no les queda más remedio que salir de las aulas a "refrescarse".

Pero ahora ya no habrá incluso espacio de recreación, pues lo que quedaba del campo fue ocupado por los stands de la feria Expochampita, que organiza la comuna distrital de San Sebastián, que incluso días antes promocionaba la actividad con autoparlantes que incomodan las labores.

Estas son algunas de las incomodidades por las que atraviesan lo escolares, los profesores y los administrativos del colegio; estos últimos no cuentan con oficinas para realizar su trabajo.

RETRASO. Se dice que las molestias pasan y las obras quedan. Efectivamente, con mucha paciencia la familia celeste acepta las condiciones con tal de ver el próximo año un colegio moderno y de calidad. Pero nadie contaba que la obra será retrasada, pues necesita de nuevos expedientes técnicos.

De toda la estructura antigua se iba a mantener sólo el edifico delantero, sin embargo se comprobó que la estructura está a punto de colapsar, razón por la cual es necesario hacer un nuevo expediente técnico, teniendo en cuenta que la construcción antigua iba a servir de soporte a la nueva edificación y es el eje del diseño arquitectónico.

Sólo en elaborar el expediente demorarían 60 días, y como se trata de obras que no estaban previstas inicialmente, también se debe esperar la aprobación del perfil y el presupuesto.

Con este panorama es más que evidente que la obra, para malestar sobre todo de los escolares, no será entregada a tiempo y probablemente el próximo año los "gatos" sigan padeciendo inclemencias durante sus labores cognitivas, que ya están bastante afectadas.