De ese total, seis están ubicadas en clínicas privadas, tres en hospitales de EsSalud y siete en nosocomios del Ministerio de Salud.
De ese total, seis están ubicadas en clínicas privadas, tres en hospitales de EsSalud y siete en nosocomios del Ministerio de Salud.

Al límite. Mientras las medidas para los contagios del se flexibilizan y el número de sigue en aumento en el , el riesgo de quedarnos de nuevo sin camas en las Unidades de Cuidados Intensivos () esta cada vez está más cerca.

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Y es que la advirtió que en y solo quedan 16 con . Dicha información fue recogida de la Superintendencia Nacional de Salud ()

De ese total -registrado ayer- seis se encuentran en clínicas privadas, tres en Essalud y siete en hospitales del Ministerio de Salud (Minsa).

Tales camas están distribuidas de la siguiente manera: Hospital de Emergencias Villa El Salvador (4), Hospital de Emergencia Ate Vitarte (2), Hospital Nacional Guillermo Almenara Irigoyen (1), Hospital I Marino Molina Scippa (1), Hospital III Suárez Angamos (1) y el Hospital de Mediana Complejidad José Agurto Tello (1).

En tanto, las clínicas Vesalio, Montefiori, Guillermo Kaelin de la Fuente, San Gabriel S.A.C. y San Judas Tadeo, tienen solo una cama UCI libre cada una.

Asimismo, en el Primer Puerto solo queda una: en la clínica Alberto Leonardo Barton Thompson.

Alerta. Al respecto, Alicia Abanto, adjunta de la Administración Estatal de la Defensoría, advirtió que “esta situación pone en riesgo a los pacientes que están en la lista de espera por una de estas camas”. En diálogo con Correo, resaltó que el descenso en dicha disponibilidad “ha sido dramático desde Navidad”, fecha en la que -por cierto- había 65 camas disponibles en la capital.

Agregó que en regiones como Piura el número de camas UCI es más limitado, pues ya no disponen de ellas.

“Si una villa tiene 15 pacientes en espera, imagínese 381 hospitales y clínicas con servicios COVID-19. Si en cada hospital hubieran 10 personas en lista de espera, estaríamos hablando de más de 3 mil pacientes con cuadros severos a graves en lista de espera”, refirió.

La situación no es muy diferente en otras regiones. Por ejemplo, la Dirección Ejecutiva del Hospital Regional Eleazar Guzmán Barrón de Chimbote confirmó ayer que ya no hay camas disponibles para pacientes que deban ingresar a UCI a causa del coronavirus.

SIN GARANTÍA. Por otro lado, disponer de un seguro privado no garantiza acceder a una cama UCI si se requiere, advirtió Alicia Abanto.

“Hay pocas camas y los costos de este servicio en clínicas son altos, hay un riesgo de endeudamiento porque los seguros tienen un tope. Además, recordemos que en la primera ola la prioridad la tuvieron los jóvenes sobre los adultos mayores”, enfatizó.

Ante este déficit, Abanto indicó que la Defensoría pidió al Gobierno que sincere la información sobre la oferta y demanda, así como la situación de la pandemia en general.

¿MOTIVOS? Sobre el tema, el presidente de la Sociedad Peruana de Medicina Intensiva (Sopemi), Jesús Valverde, afirmó que el colapso de camas UCI en Lima y en el interior del país obedece al rebrote de casos de COVID-19 de las últimas semanas.

“Lo que sucede en UCI es que, a pesar del descenso de casos, siempre hemos estado trabajando con 70 % o 77 % de copamiento. Este rebrote de las últimas semanas nos ha colapsado, dijo.

Al ser consultado en TV Perú por una eventual segunda ola de la epidemia, respondió que “cualquier incremento hará colapsar el sistema sanitario”.

¿REBROTE? Sobre este punto, el infectólogo Eduardo Gotuzzo advirtió que este mes será muy duro para el sistema sanitario, por el incremento de los casos de coronavirus.

Añadió que todo esto sería consecuencia de las manifestaciones sociales, aglomeraciones y reuniones sociales que hubo en diciembre.

“Lo que paso en Navidad lo estamos viendo en estos días, y lo seguiremos viendo en las siguientes tres semanas. Enero va a ser un mes duro, no será tranquilo; el Estado debe actuar responsablemente”, indicó a Correo.

El médico agregó que el Gobierno debe informar cuál es el estado de la compra de la vacuna.

En la misma línea, Miguel Palacios, decano del Colegio Médico del Perú (CMP), advirtió que al terminar el mes podremos apreciar las consecuencias de las reuniones sociales por las fiestas de fin de año.

“En regiones como Lambayeque y Piura ya está la segunda ola del coronavirus”, sostuvo.

Ayer, representantes del CMP y del Minsa se reunieron vía Zoom. Palacios adelantó que propondría firmar acuerdos para vacunas con laboratorios como Sinopharm, dar apertura a las playas con aforo al 40%, iniciar una campaña de comunicación para concienciar a la población sobre la gravedad de la enfermedad y entrenar a médicos de otras especialidades en el manejo de equipos UCI para COVID-19, entre otras medidas.

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