La Montaña de Siete Colores en Cusco, se ha convertido en un atractivo más que codiciado por los turistas nacionales y extranjeros. Tanto así que el número de visitantes ha crecido de manera exponencial a través de los años, constituyéndose como uno de los principales atractivos cusqueños y peruanos, junto a Machu Picchu.
Sin embargo, lo bello del paisaje y la caminata, se ve opacado por las constantes disputas por la administración del lugar. Este domingo, tras una nueva reunión de coordinación, varios comuneros incluso terminaron heridos, luego de un enfrentamiento más por el cobro de entrada para el atractivo.
Es así que el domingo por la tarde, la comunidad de Chillihuani, emitió un comunicado de urgencia, citando que todo ingreso a la Montaña de Siete Colores se verá suspendido a partir del lunes 27 de noviembre, esto a fin de salvaguardar la integridad de los visitantes nacionales y extranjeros.
“La comunidad originaria de Chillihuani, propietaria y administradora de la Montaña de 7 Colores, comunica que luego de una asamblea general, ha acordado suspender el ingreso temporalmente (...) Pedimos a los operadores de turismo y a los visitantes, respetar este acuerdo”, señala textualmente parte de la comunicación.
Sin embargo este predio, según las autoridades de Pitumarca, no pertenece a la comunidad de Chillihuani ni a la familia Condori, que se irrogan la titularidad de la montaña, sino al Estado, al que piden administrar el atractivo, establecer un boleto turístico y asegurar el tránsito de nacionales y extranjeros por la zona, mientras tanto los comuneros de Chillihuani aseguran ser propietarios de la zona en conflicto por ser una comunidad originaria ancestral.
Hasta el momento la titularidad de la zona donde está enclavado el destino turístico, aún no se dilucida, mientras tanto cada cierto tiempo las peleas entre pobladores ocasionan que la ruta de acceso se cierre, o que se cobre doble entrada para visitar el atractivo, recordemos que en el lugar ya han fallecido varios visitantes, debido a la altura y a la supuesta falta de servicios médicos correspondientes.
