La jefa del Consejo de Ministros, Mirtha Vásquez, destacó que la empresa española Repsol, a cargo de la refinería La Pampilla, no podrá contratar a residentes de las zonas afectadas por el derrame de petróleo para “actividades que impliquen algún riesgo” y que no cuenten con la preparación adecuada.
La primera ministra detalló que Repsol está reuniéndose con pobladores afectados, sobre todo pescadores que han hecho algunos requerimientos, como por ejemplo, una bolsa laboral o que se les asista con algunas alimentos.
“Independientemente de que la empresa llegue a acuerdos con la población, quiero dejar en claro que cualquier tipo de requerimiento que la población realice o que la empresa entregue no forma parte de ninguna indemnización o reparación”, advirtió Vásquez en conferencia de prensa.
“Hemos pedido que si van a acceder a dar una bolsa laboral, es decir si van a contratar a pescadores y gente de la zona, no pueden contratarlos en actividades que impliquen algún riesgo. No pueden contratarlos en actividades para los cuales no estén preparados porque eso podría generar una mayor exposición”, adelantó.
El pasado 15 de enero se reportó un derrame de 6.000 barriles de crudo en el mar de Ventanilla y que se ha extendido a parte del litoral como Ancón y Chancay. De acuerdo a Mirtha Vásquez, Repsol reportó que en la zona dañada se cuenta con 800 trabajadores para cumplir con la reparación ambiental.
“La empresa sostiene que tiene 800 trabajadores en la zona, lo que vamos a supervisar es que estos trabajadores hagan las labores de limpieza sean los calificados. No se puede traer personas que no estén calificadas para esta labor tan particular y delicada como es la limpieza ambiental”, apuntó.
La jefa del Gabinete Ministerial indicó que el Ejecutivo buscará asegurar la mitigación y reparación “del daño a cargo de la empresa que ha cometido este daño ambiental”. Además, iniciarán acciones de investigación “para determinar responsabilidades y posibles sanciones más adelante”.
Otro punto nombrado fue que pretende conseguir “reparaciones e indemnizaciones justas que correspondan al daño tan grave que han causado”.