Milagros Leiva la tiene clara. Asegura estar cada vez más lejos del exceso de ego de algunos periodistas y más cerca a la esencia del oficio. En su nueva casa Willax TV lo reafirma. Vuelve a la entrevista que considera es su bandera y donde se siente más cómoda.

Algunos colegas creen que lo que opinan o decretan marca el destino de un país...

Eso me parece exceso de soberbia, de divismo, yo creo que los periodistas siempre estamos dando nuestra opinión, inclusive en las preguntas, pero creerte el cuarto poder de la prensa, creer que tu eres el que va a marcar los destinos de un país, eso me parece exagerado.

¿Cuándo te diste cuenta que eso no era así?

Siempre lo supe. Soy periodista desde que tengo 23 años, nosotros informamos, denunciamos, de hecho podemos decidir en muchos tonos el futuro de una persona política sí, pero ningún periodista lleva de la oreja a alguien para que vote o no decide una elección. El mayor ejemplo fue el de Vargas Llosa frente a Fujimori. Todos los periodistas, casi todos los medios aseguraban que iba a ganar Vargas Llosa ¿Y quién ganó? Fujimori.

¿En qué momento el periodista empieza a desubicarse?

Los que no se ubican son los que no son periodistas, los que aterrizan en nuestro oficio. He hecho varias veces un análisis de qué personajes son los que se creen los grandes divos de la prensa y generalmente no son periodistas. No empezaron como reporteros, nunca han hecho una nota. Son economistas, abogados o intelectuales que de pronto, claro, porque tienen un buen bagaje cultural o un buen background político se sentaron en una mesa y empezaron a entrevistar. Entrevistas entre comillas, porque a veces tú sientes que no están entrevistando sientes que están dando su punto de vista o debatiendo.

¿No has caído en la tentación de creerte?

Creo que no, me han acusado de todo sí. Me han dicho últimamente que mi mayor pecado es haber llorado, y el otro día una periodista me lo recordaba y hasta había sacado cuentas de cada momento en el que me había emocionado en vivo. Yo soy emotiva pero no de ahora, lo soy desde siempre, las personas que me conocen saben que cuando me emociono puedo incluso derramar una lágrima, y cuando tengo impotencia también. Pero de diva creo que no tengo nada.

¿Además de las lágrimas que más te cuestionan?

Me han dicho que atropello cuando estoy entrevistando, últimamente me lo decían en ATV que no dejaba hablar, pero yo siento que no tenía el tiempo y yo quería llegar al tema a que me contestara la pregunta que quería. porque había investigado algo y de repente lo interrumpía demasiado.

También dicen que tu corazón es naranja... Eso me ha parecido alucinante, de fujimorista y aprista no tengo nada. Me han etiquetado de fujimorista porque he entrevistado en los tiempos en los que Keiko estaba realmente complicada a su abogada, a su hermana, porque es lo natural. Un periodista tiene que buscar a la fuente, pero claro los activistas que fungen de periodistas y que quieren solo encasillar a un programa de determinada manera no querían que se entreviste al entorno de Keiko y entonces por eso soy fujimorista, O peor cuando pasó todo lo de Chavarry, nadie podía entrevistarlo, ¿era el diablo?, ya pues, hay que entrevistar al diablo. En el periodismo hay que entrevistar a Dios, al diablo y en el medio a todos...

¿Aún te afecta lo que digan de ti?

Cuando uno sabe quién es, está bien plantado en sus ideas y tiene la conciencia limpia eso no te afecta. La verdad que digan lo que quieran, estoy cumpliendo con mi trabajo, mi función como periodista es entrevistar a todos, darle voz a todos.

Perfil

Milagros Leiva, periodista

Tras dos décadas en la prensa escrita, la periodista incursiona en la televisión en Canal N. Luego de su paso por RPP, América, Exitosa y ATV, acaba de estrenar “MIlagros Leiva entrevista” por Willax TV.