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Un numeroso grupo de volqueteros y trabajadores de carguío de material de agregados hizo un plantón en la plaza de Vista Alegre para pedir un diálogo con la autoridad local, a fin de lograr un entendimiento porque son más de doscientas las familias afectadas por el cierre de canteras de agregados, según lo dispuesto por el Estado.
De esa manera, casi un centenar de trabajadores volqueteros de Nasca enfatizaron que les urge trabajar y calificaron de injusto que personas provenientes de otras ciudades abastezcan con el material calcáreo las obras del municipio provincial, distrital o construcciones particulares.
La situación encarece el material para las edificaciones y a la vez le resta oportunidades de trabajo a casi dos centenares de familias locales.
Sobre las quejas de los vecinos por las piedras que caen de los volquetes a su paso por las calles, los trabajadores de carguío de material de agregados indicaron que quieren coordinar con el alcalde para que les dejen trabajar hasta regularizar la documentación.
"Además se podría coordinar el regado para amenguar la polvareda e incluso se podría colocar toldos en los volquetes para evitar que caiga el material".
La solución está en manos de la autoridad edil y debe ser cuanto antes, porque hay volqueteros, albañiles y otros que están sin trabajar.
