Un desconocido arrojó una granada de guerra tipo piña cerca de la casa de la ministra de Defensa, Nuria Esparch Fernández, pero por fortuna el artefacto no explotó pues tenía el seguro puesto, en el distrito de San Borja.
Explosivo
Se informó que a las 9 de la noche del último jueves, un hombre bajó de un vehículo, caminó unos metros y dejó el objeto a tres casas del domicilio de la ministra. Luego abordó el mismo carro y huyó.
Cuando llegaron agentes de la Unidad de Desactivación de Explosivos (UDEX), ubicaron el artefacto en un sardinel y cerca a basura. Luego de algunos minutos de tensión, los efectivos, protegidos con trajes especiales, retiraron la bomba dentro de una caja. El ministerio había optado desde el mismo jueves por no hacer el suceso público y se mantendrá la decisión.
Según se conoció, luego del incidente se activó el protocolo de seguridad por parte del personal que resguarda el domicilio y a la propia Esparch Fernández por ser una alta funcionaria del Gobierno de transición. Los vecinos expresaron su temor porque los desconocidos sigan dejando artefactos explosivos en la vía pública. Por ello exigieron mayor vigilancia policial y del serenazgo de San Borja.
Desde el Mindef dijeron que esperarán a que la Policía culmine las pericia para determinar la autoría.
Fuentes de la cartera de Defensa señalaron que “lamentablemente (el hallazgo de la bomba), sí ocurrió. Lo que no vamos a hacer es emitir un pronunciamiento porque la situación está controlada y se tiene que investigar. No podemos especular, no vamos a hacer ningún tipo de pronunciamiento. Vamos a dejar que la PNP haga todas las investigaciones.
El incidente se registra cuando el país aún espera expectante los resultados de la segunda vuelta electoral.