Denuncian “trato preferente” de ONPE a partido de José Luna
Denuncian “trato preferente” de ONPE a partido de José Luna

A cinco meses de las elecciones regionales y municipales 2018, la jefatura de la Oficina Nacional de Procesos Electorales () ha iniciado una severa investigación de la conducta de varios altos funcionarios y procedió a destituir al secretario general de esta entidad, Ricardo Enrique Pajuelo Bustamante, y a un adjunto que le sigue en la jerarquía.

Según un informe de Cuarto Poder, las destituciones obedecen a “irregularidades” que evidencian un presunto trato preferente para la organización política Podemos, que encabeza el excongresista de Solidaridad Nacional

La ONPE es la entidad, que valida la voluntad popular, organiza los procesos electorales, cuenta los votos, da los resultados. Cuando una nueva organización pretende inscribirse en el Registro de Partidos Políticos (ROP), la ONPE verifica las firmas de los ciudadanos en los planillones respectivos.

Quien denuncia dichas irregularidades es nada menos que una funcionaria de la propia ONPE: Susana Ivonne Guerrero López, gerente de Asesoría Jurídica.

De acuerdo al testimonio de Susana Guerrero a Cuarto Poder, hubo un “trato preferente” a la mencionada organización en el proceso de su inscripción.

600 MIL FIRMAS

Susana Guerrero declaró que ”nadie frenó el trámite cuando por reglamento debió haberlo hecho, y estamos hablando que se encontraron 400 planillones con espacios en blanco no anulados. Finalmente, el 10 de noviembre del 2017, la ONPE validó más de 600,000 firmas del millón que Podemos había presentado”.

En este caso, la modalidad puesta en práctica son los espacios en blanco en los planillones.

“No están permitidos los espacios en blanco en los planillones o listas de adherentes”, explica Susana Guerrero. “Estos tienen que ser anulados con un sello para evitar manipulaciones”, remarca la funcionaria.

“Es un requisito para que las firmas pasen en la ONPE a la fase de verificación y conteo”, prosigue.

Asegura la funcionaria que “la ONPE hizo que no vio los espacios en blanco en los planillones de Luna Gálvez y admitió su expediente, su lote de firmas, pero a otras organizaciones les ha aplicado el reglamento con todo el rigor. Es decir, devolvió todo el lote de firmas al Jurado Nacional de Elecciones para que la organización subsanara espacios en blanco no anulados”.

De acuerdo con Susana Guerrero, “esto supone un pérdida de tiempo y el tiempo es oro en el proceso de inscripción de cualquier partido. Es tiempo, trabajo y desgaste”.

El jefe de la ONPE, Adolfo Castillo, aseguró que no hay trato preferencial para nadie y reconoció “irregularidades” en este proceso, por lo que anunció una auditoría que se prolongará por tres meses.

Desde la otra orilla, Luis Navarrete, personero legal de Podemos, no reconoce un trato preferente y anuncia acciones legales contra Susana Guerrero. 

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