Las exministras de Salud, Pilar Mazzetti, y de Relaciones Exteriores, Elizabeth Astete, se defendieron ante el pleno del Congreso luego de que se sustentara el informe que plantea inhabilitarlas para ejercer cargos públicos por haber recibido las vacunas de Sinopharm en el caso “vacunagate”.
Luego que los congresistas rechazaran por 106 votos y 2 abstenciones el pedido de Martín Vizcarra, otro implicado en el juicio político por este mismo caso, para reprogramar la sesión, se le otorgo la palabra a la excanciller Elizabeth Astete, quien reiteró que recibió la vacuna del laboratorio chino luego que se la ofrecieran otros trabajadores de su despacho y convencida de que era un proceso legal.
Asimismo, reiteró lo que dijo ante la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales y luego ante la Comisión Permanente: que el 21 de enero le informó al presidente Francisco Sagasti que le habían ofrecido la vacuna y que él le dio visto bueno al procedimiento. Esto ha sido rechazado por el mandatario en reiteradas ocasiones.
De igual manera, dijo que ese mismo día le informó sobre esta conversación a la presidenta del Consejo de Ministros, Violeta Bermúdez.
“No se trata de una historia que haya inventado después del escándalo o mi salida del gabinete. Esto se demuestra claramente con el WhatsApp que el embajador Sánchez Checa envió al Dr. Málaga para coordinar mi vacunación el 21 de enero”, aseguró.
A su turno, la exministra de Salud, Pilar Mazzetti, cuestionó que no se haya atendido su pedido para postergar el debate del informe que plantea inhabilitarla y dijo que había “errores” en las infracciones constitucionales que se le atribuyen.
“Por esta ausencia de flexibilidad y lo que nos parece una precipitación evidente a lo largo del proceso y por una insuficiente comprensión, mucho me temo que se ha puesto en riesgo la protección y defensa que la Constitución me garantiza. Se me niega en este actuar precipitado la oportunidad de contar con un abogado defensor para esta audiencia”, criticó la exfuncionaria.
Mazzetti señaló que hay “errores graves” cuando se le adjudica responsabilidad por supuestamente haber cometido faltas en su función en la lucha contra la pandemia, algo que señaló no tiene relación alguna con el “error político” de haber pedido que se le aplique la vacuna de Sinopharm.
“He reconocido (mi error) primero que nadie y he pagado el precio político y he pedido disculpas, pero de ahí decir que no se protegieron los intereses nacionales y que no trabajamos al servicio de la nación hace ver que no se ha analizado los esfuerzos realizados y se ha pasado por encima de los resultados obtenidos”, concluyó.
El informe del congresista Jim Ali Mamani (Nueva Constitución) plantea inhabilitar por ocho años de la función pública a Pilar Mazzetti, y por un año a Elizabeth Astete.
Luego de la sustentación de ambas ministras, se procedió a suspender el debate de este caso hasta las 4 p.m. del mismo día, viernes 16 de abril. Esto, tras un pedido que hizo el congresista Manuel Merino (Acción Popular) para que el canal TV Perú trasmita el debate del pleno sobre el caso “vacunagate”.