Susana Villarán. (Foto: Poder Judicial)
Susana Villarán. (Foto: Poder Judicial)

En la campaña de reelección de Susana Villarán en 2014, al menos 65 personas negaron haber donado dinero, pese a que sus nombres figuran como aportantes en los reportes oficiales ante la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE).

Un informe de “Punto Final” dio cuenta que estas personas fueron utilizadas como “aportantes falsos” en un esquema para ocultar los millones de dólares que las constructoras brasileñas Odebrecht y OAS entregaron para financiar la campaña.

Según la investigación fiscal, se estima que Odebrecht y OAS aportaron millones en ambas campañas, incluyendo tres millones de dólares para la campaña del “No a la revocatoria” en 2013 y cuatro millones para la reelección.

Testimonios como el de Orlando Salazar Gamboa, Jorge Machuca Cerdán y Máximo Córdova evidencian que nunca realizaron donaciones y que algunas firmas fueron falsificadas. Muchos afirmaron no tener vínculo político ni capacidad económica para aportar. Estos aportes falsos suman casi un millón de soles según la fiscalía, mucho más que los inicialmente detectados por la ONPE.

Como se sabe, la fiscalía acusa a Susana Villarán de liderar una organización criminal dedicada al lavado de activos, asociación ilícita y cohecho, y señala a Marco Zevallos, personero legal de la campaña, como responsable de presentar informes con información falsa. Zevallos enfrenta un pedido de 18 años de prisión.

El juicio contra Villarán y sus colaboradores comenzará el 23 de setiembre, con pruebas que podrían ser determinantes para el caso que expone una operación millonaria de encubrimiento financiero tras un discurso de honestidad.

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