La Segunda Fiscalía Suprema en lo penal formalizó una investigación preparatoria contra los parlamentarios Guillermo Bermejo y Guido Bellido por presunta obstrucción a la justicia. Se les acusa de intervenir para evitar que el exmilitar Bobby Eddy Villarroel Medina, alias ‘Sacha’, pueda ofrecer su testimonio en el juicio en el que se le imputa ser afiliado a la organización terrorista Sendero Luminoso.
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Cabe mencionar que esto habría ocurrido antes de que tanto Bermejo como Bellido asumieran sus cargos como legisladores.
En el marco de las diligencias del proceso por presunta afiliación terrorista, se convocó a Villarroel Medina para declarar el 21 de septiembre de 2021, periodo en el cual Bermejo y Bellido ya ejercían como congresistas. La citación tuvo lugar en la sede de la Dirección contra el Terrorismo (Dircote PNP) de Lima.
No obstante, se alega que ambos legisladores llevaron a cabo acciones para comunicarse con ‘Sacha’ antes de su declaración, buscando persuadirlo para que evitara hablar ante las autoridades.
De acuerdo con la disposición fiscal obtenida por el medio Infobae, el contacto con el exmilitar se habría materializado a través del abogado Jhon Kleber Benites Tangoa, quien tiene vínculos con Perú Libre.
Según la investigación fiscal, el referido abogado se reunió con Villarroel en un spa de La Victoria, ofreciéndole apoyo y protección como testigo. Se describe el tono del abogado como intimidante, advirtiendo que Bermejo y Bellido “estaban en el poder y cualquier cosa le podría pasar”.
‘Sacha’ no compareció para declarar en la Dircote, pero posteriormente informó a la Fiscalía sobre el encuentro con Benites Tangoa. La Policía verificó mediante los registros de seguridad del local en La Victoria, confirmando la presencia del letrado y el exmilitar en el lugar.
De acuerdo a lo mencionado por ‘Sacha’, Benites Tangoa no solo actuaba como representante legal de Guillermo Bermejo y Guido Bellido, sino también del prófugo Vladimir Cerrón. Dado que Cerrón no cuenta con prerrogativa de antejuicio, la investigación en su caso está a cargo de la Fiscalía Antiterrorismo de Huánuco.
El exmilitar consideró que la oferta de una cantidad de dinero y asilo político era una “trampa” destinada a sacarlo del país hacia Venezuela con la intención de asesinarlo. Basándose en estos indicios, la fiscal adjunta suprema Secilia Hinojosa Cuba optó por formalizar la investigación preparatoria contra los congresistas y estableció un plazo de 8 meses para las diligencias.
En esa línea, la fiscal suprema determinó que “por ahora” no se cumplen los requisitos necesarios para solicitar al juez supremo Juan Carlos Checkley, del Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria de la Corte Suprema, la aplicación de medidas coercitivas, tales como comparecencia con restricciones, impedimento de salida del país o prisión preventiva. Por lo que, solo dispuso comunicar a Checkley sobre la continuación de la investigación preparatoria y la imposición de comparecencia simple.
En tanto, el proceso penal contra Guillermo Bermejo y Guido Bellido por presunta afiliación terrorista sigue en curso. De acuerdo a la información divulgada por el referido medio, la Sala Suprema Penal Permanente rechazó su apelación contra la resolución que permite el levantamiento del secreto de las comunicaciones.
Bermejo enfrenta otro proceso similar, donde fue absuelto en dos juicios orales, pero la Sala Suprema Penal Transitoria anuló esos fallos y ordenó nuevos juicios. La defensa de Bermejo considera estas decisiones como una violación a sus derechos y ha presentado una acción de amparo para que se archive el proceso.
