Javier Arévalo, presidente del Poder Judicial, en inauguración de sala de audiencias del penal de Barbadillo. (Foto: Poder Judicial)
Javier Arévalo, presidente del Poder Judicial, en inauguración de sala de audiencias del penal de Barbadillo. (Foto: Poder Judicial)

El Poder Judicial inauguró este martes una nueva sala de audiencias en el penal de Barbadillo, ubicado en Ate, la cual está destinada a la investigación y juzgamiento de altos funcionarios, incluidos expresidentes.

Este espacio, equipado con tecnología de punta, busca garantizar el desarrollo adecuado de los procesos judiciales de figuras políticas de relevancia en el país.

El acto de inauguración fue presidido por Javier Arévalo, presidente del Poder Judicial, quien destacó la importancia de contar con una infraestructura de este tipo para juzgar a altos dignatarios, aunque lamentó la necesidad de hacerlo.

“Quizá en un país no se debiera estar en esta situación de juzgar a sus expresidentes, pero qué vamos a hacer, la justicia decidirá lo que corresponda”, señaló.

La sala de audiencias está ubicada en una sede construida sobre un terreno de 760 metros cuadrados, que también incluye espacios para jueces, fiscales, acusados, y áreas de espera para abogados defensores, testigos, peritos y la Procuraduría.

Este nuevo ambiente será utilizado principalmente por la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema, el Juzgado de Investigación Preparatoria y la Sala Penal Especial de la Corte Suprema, instancias encargadas del juzgamiento de delitos imputados a expresidentes.

En el penal de Barbadillo actualmente purgan prisión preventiva los exmandatarios Pedro Castillo y Alejandro Toledo, quienes enfrentan diversos procesos judiciales. Además, este penal ha sido lugar de reclusión temporal para otros exmandatarios como Alberto Fujimori, quien fue condenado a 25 años de prisión e indultado posteriormente, y Ollanta Humala, investigado por el caso Lava Jato.

Durante la ceremonia, el presidente de la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema, César San Martín, subrayó la relevancia de mantener audiencias presenciales para asegurar un proceso judicial adecuado, sobre todo en casos que involucran a expresidentes.

“La virtualidad tiene que ser la excepción”, recalcó San Martín, señalando que la sala podrá ser utilizada en otros procesos que lo requieran, más allá de los que involucren a exmandatarios.

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