María Fernanda Cabal responde nuestra llamada y muestra preocupación sobre la incertidumbre electoral generada después de la segunda vuelta presidencial. Dice que el caos que vive el Perú es similar al que vivieron otros países, como Venezuela, Bolivia y Brasil, entre otros de Latinoamérica. Así, denuncia que existe una mafia detrás de ciertos candidatos de izquierda y expresa su malestar pausadamente. Guarda la calma antes de formularle la primera pregunta. Entonces, enciendo la grabadora.
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Senadora, ¿qué conocimiento tiene usted sobre el fraude electoral en países como Venezuela o Bolivia?
En Venezuela hacían el fraude en mesa, donde no había posibilidad de tener testigos de otros partidos y se alteraban las actas. Ahí, si el votante era funcionario público rápidamente se le echaba del trabajo cuando se comprobaba por quién había votado. El nivel de amedrentamiento era altísimo y el voto electrónico lo que hizo fue perpetrar la dictadura de Maduro.
¿Fue similar la situación en Bolivia?
En Bolivia cuando echaron a Evo la gente empezó una disputa. Casi una guerra civil se da entre la región cocalera, que era la protegida por Evo, y la región de Santa Cruz de la sierra y las demás donde hubo bloqueos y confrontaciones terribles. Logran sacar a Evo, pero no es suficiente. Sabemos que en el conteo electoral nuevamente se dio el fraude. La fragmentación de la derecha fue terrible porque no hubo una unificación para la protesta, pero finalmente ganó el candidato de Evo Morales con la cantidad de dinero de los cocaleros de la zona de Cochabamba y tal como les pasa a ustedes: hubo un fraude evidente en las mesas electorales.
¿Acaso ese es un modelo que se sigue en distintos países de Latinoamérica?
Sí. Esta empieza en Venezuela con la asesoría de los cubanos. Los cubanos empiezan a introducirse en Venezuela, especialmente a través de las misiones médicas, las cuales empiezan a forzar a los votantes a entregar sus votos a Chávez, y si no lo hacían no habría atención médica. Ahí es donde inicia toda la corrupción y el fraude electoral. En Colombia, en 2014, Juan Manuel Santos se robó las elecciones del excandidato Óscar Ramón Zuloaga con el dinero de Odebrecht, que también pertenece a esa misma estructura criminal promovida por el Foro de Sao Paulo, por Lula y por Chávez. Se alteraron las actas con los números y las cifras de resultados electorales. Aquí estamos seguros que en el conteo registrado también hubo una alteración de, por lo menos, millón y medio de votos.
El expresidente de Colombia Andrés Pastrana denunció un supuesto andamiaje criminal del que usted similarmente menciona, pero que estaba financiado y encabezado por Nicolás Maduro, el cual -precisamente- está detrás de la candidatura presidencial de Pedro Castillo...
Hay que recordar que después de la caída del Muro de Berlín inmediatamente los socialistas en América Latina entienden que no pueden tener esa oportunidad de salir adelante y nos dejan sumergidos en estas mismas guerras de los años 60. Sin embargo, años más tarde Lula Da Silva arropa a Chávez y lo convierte en figura en el Foro de Sao Paulo, donde las FARC fueron fundadores. Ahí empiezan a capturar Estados como lo hizo Lula Da Silva cuando se queda en Brasil. Amenazan a Estados prósperos como sucedió con Chile y también a intentar subvertir el orden en Paraguay. Es una fórmula. Ellos odian la democracia, pero la usan para llegar al poder.
Por todo lo que cuenta, ¿cree que este mecanismo o modelo de fraude se ha aplicado en Perú?
Pero sin lugar a dudas. Solo basta ver quiénes sacaron la cabeza para proclamar a Castillo presidente, cuando no se ha terminado de revisar todas las impugnaciones. Fue el Foro de Sao Paulo. Es la misma fórmula aplicada en otros países. Las firmas falsas en mesa y otros actos irregulares (para favorecerse). Ahora sigue Colombia. Todo está planificado, esto es mafia y es comunismo.
En algunos artículos señalan que debería anularse la segunda vuelta. ¿Por qué la insistencia?
El 69% de peruanos está convencido de que hubo fraude. Yo me pregunto ¿por qué la OEA es tan blandita? ¿Por qué Luis Almagro, que se atrevió ir a Bolivia acompañado de una misión, no va al Perú y evita una confrontación? ¡Qué vaya y revise las actas! Si se recuenta obviamente ganará Keiko Fujimori por lo menos por 700 mil votos de diferencia.
¿Cómo evalúa -precisamente- el desempeño de los observadores electorales en Perú?
Es demasiado protocolar y dejaron de cumplir la labor que cumplían. Hubo mesas que no fueron observadas y es donde hubo el fraude masivo. Además, toda la expectativa de trazabilidad que se tenía del resultado electoral -en primera vuelta- no se dio. Uno desde el principio no tiene estos cambios tan abruptos de 600 mil votos para que se den la vuelta.
Ciertos sectores políticos insisten en que la OEA desarrolle una auditoría. ¿La petición está fuera de lugar o no?
Sí. Debe hacerse. Para eso existen esos organismos y si no, entonces, que no existan más. Si queremos salvar a nuestros países debemos exigirle a la OEA, pero también a los Estados Unidos que los peruanos tienen derecho a vivir en libertad.
¿Considera imparcial el papel que tiene el presidente Francisco Sagasti frente a este pedido?
Francisco Sagasti es un alfil de la izquierda nacional. Lo que pasa es que él es un rojo caviar.
¿Analizando el fondo del asunto por qué no pensar que Keiko Fujimori busca aferrarse a la posibilidad de ser presidenta?
Keiko está en todo su derecho de defender la voluntad popular del pueblo peruano, que se le quiere robar. Ella no quiere aferrarse al poder. Quien quiere aferrarse al poder es Castillo y sus secuaces no permitiendo la transparencia electoral. Ahora, él es el bueno y ella la mala. Si está con la verdad no debería importarle el reconteo de votos por auditoría de la OEA.
¿Qué podría significar un cambio de Constitución en el Perú en medio de la pandemia?
Ello solo sirve al que se va a quedar permanentemente en el poder. Quien quiere perpetuarse primero cambia la Constitución. Esa es la receta socialista que no ha producido en el mundo ningún buen resultado.
¿Qué piensa de la declinación del magistrado Luis Arce del JNE?
Es un hecho gravísimo porque señala que el jurado no es una institución confiable. Está mostrándole al público que el resultado electoral tampoco lo es.
El presidente Iván Duque sufrió un atentado que supuestamente habría sido provocado por disidentes de la extinta guerrilla de la FARC y otros grupos narcotraficantes. ¿Qué comentarios tiene sobre el tema?
No se puede esperar nada menos de la guerrilla. Es una tragedia en Colombia. Lo que han hecho con el presidente es dar un mensaje directo de que “necesitamos muerte”. Todas estas protestas significan un golpe que quieren darle al presidente Duque.