Pedro Castillo destacó que el Gobierno hará seguimiento de los compromisos. (foto: GEC)
Pedro Castillo destacó que el Gobierno hará seguimiento de los compromisos. (foto: GEC)

El presidente de la República, firmó en la playa Cavero, en Ventanilla, el decreto supremo que declara de interés nacional la emergencia climática, con lo que aseguró que se podrá realizar un seguimiento a las acciones que se tomen para mitigar los efectos del cambio climático.

“Este decreto no solo implica normas como es reducir riesgos ambientales sobre la población, sino además obliga a asumir compromisos concretos desde el Gobierno para reducir la emisión de gases con efecto invernadero que tanto daño hacen a nuestra atmósfera”, recalcó el mandatario.

Antes de suscribir el decreto desde una de las zonas afectadas por el derrame de petróleo ocasionado por una embarcación de Repsol en las playas de Ventanilla y otros distritos de Lima y el Callao, el mandatario reiteró que desde el Gobierno tomarán acciones para mitigar los daños de este desastre a través de un comité de crisis.

Pedro Castillo detalló que las medidas que se asumirán a través de la declaratoria de interés nacional de la emergencia climática serán supervisadas desde el Ministerio del Ambiente y el resto del Gabinete ministerial.

“Estoy seguro que eso también lo hará el Congreso y también las municipalidades porque el pueblo tiene que estar atento a los que hacen las autoridades. Por eso, desde mi Gobierno estaremos atentos y seguiremos con especial cuidado el cumplimiento de estas medidas”, aseveró

La suscripción de este decreto se da como consecuencia de lo que se afirmó durante la XVI Asamblea de las Naciones Unidas, donde ratificó el compromiso de que el Perú se convierta en un país de carbono neutral para el 2050 y que se reduzca las emisiones de gases de efecto invernadero entre 30% y 40% para el 2030.

En la actividad de este jueves 20 de enero estuvieron presentes la presidenta del Consejo de Ministros, Mirtha Vásquez, el ministro del Ambiente, Rubén Ramírez, congresistas y autoridades locales.