Pérez Rocha: “A Castillo no le interesa la seguridad del país”
Pérez Rocha: “A Castillo no le interesa la seguridad del país”

El aumento de la criminalidad, la falta de iniciativa para abordar temas de seguridad y la reciente renuncia del ministro (Interior) ha merecido que exautoridades del sector, entre ellos el exdirector de la Policía Eduardo Pérez Rocha, cuestionen al presidente por sus malos manejos para gestionar o dirigir al país por buen camino.

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En esa línea, Pérez Rocha sostuvo que al jefe de Estado “no le interesa la seguridad” porque “ni siquiera tiene una audiencia con su ministro del Interior” para tratar esos temas; sobre todo en un contexto en que el índice de criminalidad aumenta progresivamente.

Para el exdirector PNP, “esto es algo que nunca se ha visto”, al menos, en un presidente de la República.

“Es preocupante haber escuchado las declaraciones de Avelino Guillén. Hace 14 días le pide audiencia (a Castillo) para conversar asuntos de aumento de la delincuencia y, sin embargo, no le ha dado respuesta”, dijo en Canal N.

Guillén, como se sabe, renunció irrevocablemente a su cargo bajo el sustento de la falta de respaldo del mandatario a sus decisiones como, por ejemplo, el proyecto de resolución suprema de pase al retiro del comandante general de la PNP, Javier Gallardo.

Al tener en cuenta dicha dimisión, Pérez Rocha preguntó qué medidas se adoptarán ahora que la declaratoria de emergencia quedó en el limbo. “Si renunció el ministro, ¿qué estado de emergencia se llevará a cabo?”.

Al respecto, sostuvo que Castillo Terrones debe responder todas estas interrogantes debido a que es el jefe de la PNP y el encargado de la seguridad pública, de acuerdo con el artículo 44 de la Constitución Política del Perú.

“Esto tiene que ser explicado por el presidente”, ratificó.

MÁS POSTURAS

Similar fue la opinión del exministro del Interior Remigio Hernani. La exautoridad suscribió las palabras de Pérez Rocha al indicar que, efectivamente, al jefe de Estado “no le interesa la seguridad” del territorio nacional.

“Lo que le interesa es tener a la policía a su disposición para sus fines, conjuntamente con el secretario general de su partido, Vladimir Cerrón”, declaró a Correo.

Sobre el tema, aseguró que el general Gallardo trata de “hermano” al líder del partido de gobierno sentenciado por corrupción. También añadió, aunque no ofreció mayores detalles, que deduce que Cerrón habría intercedido para que Gallardo sea el comandante general PNP.

“¿Y por qué Gallardo? Porque es manejable al 100%”, enfatizó.

Agregó que Gallardo cumple con los fines que quieren tanto el jefe de Estado como el dueño de Perú Libre “de tener a la Policía en sus manos, a su disposición”.

Sobre el tema, el también extitular del Interior Wilfredo Pedraza sostuvo que el jefe de Estado no tiene la capacidad para tomar decisiones rápidas en el sector, debido a que existiría algún compromiso de por medio para “no hacerlo”.

“Lo que creo más bien es que hay una impericia política. El presidente Castillo no tiene ningún horizonte en materia de seguridad ciudadana”, refirió.

Pedraza dijo que le parece entendible su inexperiencia por su falta de formación en la cosa pública y en asuntos políticos.

“Está rodeado de personas ideologizadas, también sin experiencia en el sector público. Lo que probablemente ocurre es que su entorno es incapaz de brindar asesoría al presidente, que lo necesita a gritos”, opinó.

Consultado sobre la renuncia de Guillén por el respaldo implícito del presidente a Gallardo, respondió que un conflicto como el que se destapó en este caso es absolutamente inconcebible cuando se maneja un ministerio.

“No podría haber permitido que el comandante general de la Policía se dispare en despachos con el presidente o él proponga su lista de quiénes pasan al retiro”, expresó.

Añadió que le pareció “nefasta” la actitud de Castillo, porque en todo tema delicado como este debería avalar a su ministro, ya que es su operador político.

“Si el ministro había decidido cambiar al comandante general de la Policía esa habría tenido que ser la ruta. (...) Me parece que cuando un comandante general es capaz de oponerse a decisiones importantes del ministro solo hay una razón: Tiene alguien que lo sostenga y, obviamente, quien lo sostiene es el presidente”, explicó.

CUESTIONAMIENTOS

Luego de haber renunciado a su cartera, el ministro Guillén ofreció su versión del porqué dimitió al Ministerio del Interior. Sustentó su renuncia por el poco respaldo de parte del presidente Castillo sobre sus acciones en el sector, específicamente, sobre la baja del general Gallardo.

En entrevista a Epicentro TV, indicó que hace dos semanas entregó el proyecto de pase al retiro del cuestionado alto oficial. Sin embargo, al no tener respuesta después de 14 días, decidió presentar su renuncia.

“¿Pasar al retiro a generales como Arriola (Dircote), Tiburcio (Dirincri), Lostanau (Escuela Nacional de Formación Profesional Policial), Angulo (jefe de la Región Policial Lima)?, ¿qué cosa se pensaba hacer?, ¿desarticular por completo a la Policía? Nosotros nos opusimos”, dijo, en otro momento, al referirse a los candidatos que iban a ser pasados al retiro.

Entre tanto, aconsejó al presidente Castillo que cambie a todo su equipo de asesores, que escoja bien a su personal, que establezca metas y, sobre todo, “pensar que el Perú no es un sindicato”.

“El Perú no puede manejarse como un sindicato, debe olvidarse de eso, y ya no estamos en campaña electoral”, agregó.

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Al ser consultado sobre si los asesores de Castillo aportaban o desarrollaban una buena labor, Guillén respondió lo siguiente: “Veo guerras, es una guerra permanente entre ellos. Hablan de tendencias, sectores y, entre ellos, están en una guerra sindical en Palacio. Y ahora se está expresando con la denuncia al señor Carlos Jaico. Eso no puede continuar así, eso tiene que acabar. Al Gobierno le falta definir un rumbo”, puntualizó Guillén.