El Pleno del Congreso de la República aprobó ayer, por mayoría y en segunda votación, el dictamen que elimina la inmunidad parlamentaria. Fueron 103 legisladores los que votaron a favor y 14 en contra. Solamente hubo una abstención.
DEFINITIVO. Dicha norma, al ser en realidad una reforma constitucional, debía ser aprobada en dos legislaturas consecutivas y con al menos 87 votos. Por ello, ayer se ratificó definitivamente.
La autógrafa le otorga a la Corte Suprema la competencia para procesar a los legisladores por delitos comunes.
El dictamen fue sustentado por el nuevo presidente de la Comisión de Constitución, Luis Valdez (Alianza para el Progreso), quien alegó que la inmunidad parlamentaria ha sido “aprovechada por personajes que se protegen con ella”, un hecho que ahora ya no ocurrirá.
“Hoy, este Congreso se sacude de cualquier mancha de inmoralidad e impunidad en la percepción de nuestros ciudadanos”, concluyó el legislador apepista.
ARGUMENTOS. Durante el debate, Otto Guibovich (Acción Popular) destacó que pese a la poca duración de este Legislativo, ha ejecutado reformas postergadas. “Lo hemos hecho con la convicción y sabiendo que éramos un Congreso de corta duración, pero no podíamos esconder más temas que eran prioritarios”, dijo.
A su turno, el portavoz de APP, César Combina, recordó que la inmunidad parlamentaria ha permito a muchos escaparse de actos ilícitos, lo que ya no sucederá.
“Por años, la investidura parlamentaria ha sido buscada no solamente con la misión de ayudar, sino para que muchos también puedan escaparse de los ilícitos que han cometido y mofarse de la justicia” enfatizó.
A su turno, Gino Costa (Partido Morado) manifestó que muchos legisladores abusaron de su inmunidad y que espera que ahora cambie la realidad en el Legislativo.
“Se ha afectado la imagen de la institución parlamentaria y convirtiéndose en uno de los peores rostros de la corrupción política y congresal”, recalcó.
En contraste, José Vega (UPP) se mostró en contra de esta supresión, debido a que no incluye a presidentes ni ministros. A su juicio, es una reforma “a medias”.
Una opinión similar expresó la parlamentaria Martha Chávez (Fuerza Popular), quien lamentó que el Congreso debata un falso problema para el país, debido a que perjudica el rol fiscalizador de los legisladores.
En contra
Entre los congresistas que votaron en contra de esta norma destacaron el expresidente Manuel Merino, Martha Chávez y Edgar Alarcón.