Excongresita Michael Urtecho y esposa, Claudia González, durante el juicio que culminó definitivamente ayer, 8 de noviembre de 2024.
Excongresita Michael Urtecho y esposa, Claudia González, durante el juicio que culminó definitivamente ayer, 8 de noviembre de 2024.


Después de un proceso de 11 años (desde 2013) el sistema de justicia finiquitó, en forma definitiva, el terrible caso del excongresista Wilson Michael Urtecho Medina y el de su esposa, Claudia Gonzales Valdivia, ratificando en segunda instancia la condena a 22 años y 5 meses, y a 28 años de prisión, respectivamente.

En ambos casos la sentencia es por delitos concusión (recorte de salarios de cuatro empleadas del despacho congresal) y enriquecimiento ilícito por casi dos millones de soles y más de 102 mil dólares entre los años 2006 y 2013, periodo en que tuvo el cargo de congresista (por los partidos Unidad Nacional y Solidaridad Nacional).

La Sala Penal Permanente de la Corte Suprema, tras ratificar la sentencia de agosto de 2023 ordenó que Urtecho Medina y la señora González Valdivia sean trasladados de inmediato a sendas cárceles públicas.

“El colegiado supremo señala que por la gravedad de los hechos se debe imponer la ley, así esta sea dura”, explica el Poder Judicial al informar del fallo en su cuenta de X, aludiendo a la condición de discapacidad física del sentenciado (Urtecho sufre desde niño una enfermedad muscular que lo postró en una silla de ruedas de por vida).

PRIMER CASO.

El de Urtecho es el primer caso de un parlamentario destituido por el Congreso, inhabilitado y sentenciado por una considerable cantidad de años de prisión.

Es también uno de los primeros casos de “mochasueldos” y una brutal advertencia a legisladores del actual Parlamento investigados por el mismo delito.

Urtecho fue hallado responsable de abusar de su cargo de legislador para confiscar parte del salario de cuatro trabajadoras de su despacho a cambio de contratarlas, promoverlas y renovarles sus contratos.

También de haber utilizado su cargo congresal, su liderazgo en una iglesia evangélica de Trujillo y su discapacidad para el incremento ilícito

de su patrimonio.