El periodo congresal 2021-2025 ha dejado una serie de impensadas alianzas entre bancadas que suelen exhibir diferentes tendencias y líneas ideológicas. Por ello, Correo revisó el grupo de iniciativas parlamentarias que más votos obtuvieron a lo largo de este tiempo, y los grupos parlamentarios que las apoyaron.
Se trata de al menos 15 iniciativas, entre las que figuran prórrogas, modificaciones al desarrollo del proceso penal o vacancias, que evidencian los intereses y afinidades en común entre diversos grupos políticos.
Predominaron los votos de Fuerza Popular, que se mantiene como mayor fuerza política al interior del Parlamento –y solo perdió cuatro congresistas de los 24 con los que inició el periodo– , y Perú Libre.
Este último, sin embargo, se desintengró, con el tiempo, en grupos parlamentarios de menor impacto, como el Bloque Magisterial o la Bancada Socialista. Hoy tiene solo 11 legisladores de los 37 con los que empezó en 2021.

En detalle
El actual Congreso suma tres prórrogas al Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo) y dos retiros de los fondos de AFP. Sin embargo, la coincidencia principal entre las bancadas de mayor número de miembros está relacionada a aquella que genera cambios en la persecución del delito.
Leyes como la 31751, llamada en su momento “Ley Soto”, por el congresista que la impulsó (Alejandro Soto-APP) –luego declarada “inconstitucional e inaplicable” por el Poder Judicial (PJ)–, fue una de las primeras iniciativas en generar atención. Su objetivo era recortar los plazos de prescripción penal.
A ella, se sumaron medidas como la norma que fija plazos para concluir los procesos de colaboración eficaz, la exclusión de partidos políticos de responsabilidad penal, entre otros. Suman hasta cuatro las iniciativas relacionadas a procesos penales, ya sea en sede fiscal o judicial, las que fueron aprobadas con amplía mayoría en el hemiciclo (ver infografía).
Solo en uno de los casos no primó el interés congresal. La Ley 32181, que eliminó la detención preliminar en casos de no flagrancia, recibió tal número de críticas que, tras la presión ciudadana, finalmente fue derogada en marzo de 2025.
Para el analista político Fernando Tuesta “esto forma parte del ciclo de inestabilidad y poder del Congreso que inicia en 2016”.
“Este congreso lo plasma de manera más clara. Ha dictado una serie de normas, algunas muy cuestionadas, otras claramente populistas y, sin duda, algunas de carácter inconstitucional. No hubo contrapesos y control de entidades como el Tribunal Constitucional”, señaló.
El especialista consideró que “que se están tramitando claramente intereses, no solo mercantiles, sino también provenientes de sectores mafiosos”. Añadió que “se ha puesto en evidencia que el tema ya no es ideológico”.
“No hemos visto, en la historia contemporánea, ningún Legislativo que tenga tanto poder como el que ha desarrollado este, desde Pedro Pablo Kuczynski, pasando por Martín Vizcarra, Dina Boluarte y el presidente José Jerí. La probabilidad de que el próximo Congreso desarrolle la misma dinámica es alta”, puntualizó.
Finalmente, indicó que “el problema del Parlamento es que es la única institución en el país sin control” y, muestra de ello, es el “retroceso enorme” registrado en mediciones sobre la calidad de la democracia en el Perú. Una que ya es calificada como “extremadamente precaria”.





