Por Erick Rivera y Sofía López
El Gabinete que encabeza Guido Bellido acusa su segunda baja. Y es que el presidente del Consejo de Ministros, Guido Bellido, le pidió la renuncia al ministro de Trabajo y Promoción del Empleo, Iber Maraví Olarte, quien enfrenta una serie de cuestionamientos por sus supuestos vínculos con el terrorismo.
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Tal decisión se tomó luego de que el programa Panorama revelara un atestado policial de 1980, el que da cuenta que Maraví Olarte participó en un atentado terrorista con Edith Lagos, quien integró Sendero Luminoso (SL) y fue abatida por las fuerzas del orden en 1982.
Así, Maraví Olarte se convierte en el segundo ministro en dejar el Gabinete de Guido Bellido, luego de que el canciller Héctor Béjar dimitiera por sus polémicas declaraciones sobre la Marina de Guerra, a la que acusó de iniciar el terrorismo.
Conocidos los hechos, el secretario general de Perú Libre (PL), Vladimir Cerrón, aseguró que la decisión del premier “fortalece su liderazgo”.
“Lo que no pudieron con la fuerza algunas bancadas, el premier lo hizo tras la confianza democráticamente delegada”, tuiteó.
Al cierre de esta edición, el portal Sudaca citó declaraciones del presidente del Consejo de Ministros en las que confirmaba que ya le había pedido su dimisión. No obstante, el Gobierno todavía no se había pronunciado de manera oficial, así como tampoco el propio Maraví.
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Cita
La tarde de ayer, Maraví se reunió con Guido Bellido.
“Gracias ministro Iber Maraví por tu visita, la grandeza de un hombre está en su sencillez”, tuiteó el jefe del Gabinete tras el encuentro.
La publicación estuvo acompañada de una fotografía de ambos en la oficina de la PCM.
Unas horas después, Bellido Ugarte escribió un nuevo mensaje y refirió que con las atribuciones que le dio el Congreso, mediante la cuestión de confianza, se procederá a cumplir con sus compromisos, “evaluando el desempeño de los ministerios más cuestionados”.
Cabe precisar que el ministro de Defensa, Walter Ayala, dijo más temprano que “es el presidente quien da la confianza y la quita”.
En diálogo con Canal N, indicó que en el caso del titular de Trabajo se trata de investigaciones todavía en curso, aunque dejó en claro que una persona condenada por el delito de terrorismo es un “delincuente terrorista”.
En la mira
Las críticas contra Maraví se sustentan en los graves cuestionamientos y vinculaciones con el terrorismo (ver infografía) que se han difundido desde que asumió la cartera.
Precisamente, la última de ellas da cuenta que el 21 de junio de 1980 la terrorista Edith Lagos fue detenida en un atentado, mientras que Iber Maraví estaba como “no habido”. Ambos, junto a un grupo, intentaron atacar la oficina de agua potable N° 2 de Ayacucho.
De acuerdo con el atestado, Lagos le contó a otra persona, que ‘Bonifacio’ había sufrido quemaduras debido a que “Iber Maraví se apresuró en prender la gasolina”.
Tras la publicación, llegaron voces desde diferentes frentes del Congreso, pidiendo la dimisión inmediata del titular de Trabajo.
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La presidenta del Legislativo, Maricarmen Alva (Acción Popular), calificó de “insostenible” la continuidad de Iber Maraví en el cargo.
“Las nuevas revelaciones de vínculos con el terrorismo exigen una decisión inmediata”, enfatizó.
Vía Twitter, la parlamentaria agregó que el “gobierno debe remover al ministro si este no renuncia”.
En la misma línea, Lady Camones (APP), primera vicepresidenta del Parlamento, le exigió al presidente Pedro Castillo el retiro inmediato de Maraví: “¿¡Qué espera?! La gobernabilidad exige cambios por el bien del país”.
En tanto, Patricia Chirinos (Avanza País), tercera vicepresidenta del Congreso, le pidió al premier Bellido actuar con coherencia y no publicar fotografías que ofendan al Perú.
“Anuncie la destitución del ministro Maraví ¿o cree que la Dircote miente cuando lo señala de coautor de atentados terroristas?”, consignó en sus redes sociales.
Sobre el tema, Correo consultó con Eduardo Salhuana, vocero de APP, bancada que votó a favor de la confianza del Gabinete Bellido.
Al respecto, el apepista consideró que la última información difundida sobre Maraví “complica su continuidad” en un cargo tan importante.
Recordó que si bien su grupo parlamentario votó a favor de la confianza, eso no implica avalar todas las decisiones del gobierno de turno.
“No tenemos ninguna alianza, ningún pacto con el gobierno, el control político continúa”, aseguró.
Desde un punto de vista personal, Salhuana consideró que los presuntos vínculos de Maraví con el terrorismo, “justifican una remoción”.
Respecto a censurar a otros ministros, sostuvo que la prioridad en ese momento era Maraví.
Preparados
Más temprano, la bancada de Renovación Popular (RP) publicó una carta abierta al presidente Castillo, en la que expresaba que la permanencia de Maraví en el cargo era insostenible, dado que incumplía el artículo 6, numeral 4, de la Ley del Código de Ética de la Función Pública, “el mismo referido a la idoneidad entendida como la aptitud técnica, legal y moral, como condición esencial para el acceso y ejercicio de la función pública”.
Por ello, pidieron la renuncia inmediata del antes mencionado y que se designe a una persona idónea.
Para reforzar su exigencia, adelantaron que comenzarían la recolección de firmas para interpelarlo.
En diálogo con Correo, su vocero alterno, Alejandro Muñante, sostuvo que si el mandatario Castillo no enmendaba tal situación, a partir de hoy buscarían las firmas para impulsar una moción de interpelación y no descartaba una censura.
“Tenemos que reconocer que no todos los colegas van a estar dispuestos a firmar una moción de censura, por lo tanto, la interpelación es el mecanismo inmediato para poder ejercer este control político”, explicó.
Muñante refirió que dicha vía es una manera de exponer los cuestionamientos de Maraví ante la representación nacional, luego de lo cual podrían establecer si había consenso para retirarlo del cargo.
En otro momento, añadió que en Renovación Popular sí estaban convencidos de que procedía una censura inmediata.
Por su parte, el legislador José Cueto, también de Renovación Popular, recordó que el Parlamento tiene la potestad de interpelar y censurar a ministros cuestionados, en alusión a lo dicho por el premier Bellido, quien había afirmado que presentarían cuestiones de confianza por cada intento de censura a un ministro.
“Nosotros no nos vamos a dejar amedrentar porque al señor premier se le ocurre amenazar al Congreso”, dijo Cueto en RPP.
La eventual dimisión del titular de Trabajo aún deja pendiente los cuestionamientos a otros integrantes del Gabinete Bellido.
Jorge Montoya, vocero de Renovación Popular, señaló en más de una oportunidad que buscarán censurar por lo menos a seis ministros.
El 26 de agosto, hizo referencia a un total de cuatro: Iber Maraví (Trabajo), Juan Carrasco Millones (Interior), Walter Ayala (Defensa) y Anahí Durand (Mujer y Poblaciones Vulnerables).